AHORA VALCÁRCEL

Se nos vuelve a torcer otro de los que se prometía como proyecto emblemático para el Doce. La transformación prevista del magnifico edificio de Valcárcel en un flamante hotel de cinco estrellas también se ha ido al traste. Ahora, como siempre, comienzan a sonar las voces de nuestros responsables políticos, esos que están ahí para velar por los interese de la ciudad, y comienzan a descalificarse inculpándose unos a otros no sé de qué y el resultado, como siempre, es que la ciudad sigue siendo la perjudicada. Cuando se van a enterar esos señores que el único trabajo que tienen que realizar es procurar el bien para su ciudad. Tienen que dejarse de tantas monsergas baratas y dedicarse a eso a procurar que, como sea, Cádiz progrese, que disminuya el paro creando puestos de trabajo e intentar atraer inversores, como el que ha volado. Pero, a la vista está y se demuestra, una vez más, que lo único que les importa más es salir en la foto con grandes titulares, despotricar a diestro y siniestro y, sin dar una explicación medio coherente, encogerse de hombros diciendo: «Si no se hace el hotel no es por mi culpa». No mis queridos señores y señoras rectoras políticas, la culpa, otra vez es de ustedes y nada más que de ustedes. Se dedican a vegetar en sus puestos y poco a poco van acabando con todas nuestras ilusiones y todos nuestros proyectos de progreso, a donde nos van a llevar. Si, como se demuestra día a día, son así de ineptos ¿Por qué no se van y nos dejan en paz de una pajolera vez? Ya está bien de monsergas, si Dios no lo remedia, va a llegar el Doce y seguiremos esperando el santo advenimiento. Eso sí, oficinas del Bicentenario aparecen por todos lados pero, para eso, sólo para salir en la foto.