Teresa avisa de la importancia de la detección precoz. :: EVA LINDBERG
Ciudadanos

«Cada vez hay más casos de enfermos de alzhéimer que desaparecen desorientados»

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La familia de un anciano de Sanlúcar que apareció el domingo muerto en una balsa de riego ha sido víctima de la peor consecuencia que puede acarrear la enfermedad del alzhéimer. El fallecido, de 84 años, salió de su casa el viernes y nunca regresó. Y no lo hizo por propia voluntad. Desorientado, llegó a andar varios kilómetros hasta caer en la alberca. Un accidente que devuelve a la actualidad los riesgos que conlleva esta dolencia. A la asociación Alzhe Cádiz cada vez recurre más la Policía cuando se denuncia la desaparición de un enfermo. Detrás no hay ningún extraño caso que deba ser investigado sino una simple cuestión estadística. El alzhéimer se extiende en una sociedad que va envejeciendo, aunque la edad no es el único factor de riesgo. La directora de este colectivo asociado aporta algunas claves que pueden ser de utilidad para aquellas familias que viven día a día con el temor de que también les pueda ocurrir lo que a ese anciano de Sanlúcar.

-Cuando se habla de incidencia, ¿se puede aportar una cifra aproximada de enfermos en la provincia?

-En Andalucía existen unas 80.000 personas diagnosticadas y en Cádiz serías unas 8.000 ó 9.000. Pero son unos datos muy estimativos porque se sabe que hay un buen número de enfermos que están en sus casas sin recibir tratamiento porque el entorno relaciona sus problemas de memoria a lo que se han considerado siempre achaques de la edad.

-Pero sí se puede afirmar que estamos ante un colectivo que crece y, por tanto, accidentes como el ocurrido en Sanlúcar han dejado de ser anecdóticos.

-Sí, cada vez hay más casos de enfermos de alzhéimer que desaparecen desorientados. Aquí llama la Policía más a menudo para pedirnos ayuda cuando les llega una denuncia. Es la consecuencia de una enfermedad con una incidencia mayor.

-¿A día de hoy tienen herramientas suficientes las familias para evitar que un paciente desaparezca?

-A partir de la Ley de Dependencia ha mejorado bastante la situación, pero también es cierto que los enfermos que están diagnosticados en etapas muy iniciales no les reconocen como grandes dependientes y, por tanto, las familias no tienen acceso a las ayudas económicas. Ésa es una de nuestras principales demandas porque si bien son pacientes que pueden moverse sin dificultad, pueden desorientarse en un momento dado y tener un accidente mortal.

-¿Existe alguna estimación sobre el gasto que acarrea el cuidado de un enfermo de alzhéimer?

-Se ha calculado un coste medio anual que oscila entre los 17.000 y los 24.000 euros.

-¿Pero habrá muchos gaditanos que no puedan afrontar esa cantidad?

-Exacto. Hay que tener en cuenta, además, que en muchos casos se deja de ingresar dinero porque el cuidador deja el trabajo para estar al lado del enfermo. Es una enfermedad muy costosa y por eso muchas veces las familias se ven desbordadas y no pueden evitar que en un descuido, el paciente se marche de casa y termine desorientado.

-Al tratarse de una enfermedad sin cura, ¿en qué medida beneficia una detección precoz?

-Es muy importante porque se consigue frenar el avance y mejorar la calidad de vida del paciente. El problema es que habitualmente se confunde con una demencia propia de la edad anciana y cuando aparecen los primeros síntomas no se les presta atención.

-¿Cuáles son esos síntomas?

-Falla la memoria más reciente. Por ejemplo la persona no sabe lo que acaba de hacer hace sólo unos minutos. Falla también la atención y, por supuesto, la desorientación en el espacio y en el tiempo.

-Es importante auxiliar a un enfermo si aparece deambulando por la calle, ¿cómo reconocerlo?

-Yo creo que es fácil. Probablemente tendrá la mirada perdida, hará preguntas sin mucho sentido y dará muestras de estar desorientado. Lo recomendable es acercarse a él de forma tranquila, tratar de saber quién es y si no es posible, quedarse a su lado y avisar a la Policía.