Adiós a la condición de invicto

Fin a la buena racha. A la séptima fue la vencida. El San Fernando encajó su primera derrota del curso después de amagar con tres empates consecutivos y caer en Mairena en un choque en el que mereció más.

A lo largo y ancho de la mañana de ayer, el San Fernando fue el claro dominador de la situación. Los hombres de Antonio Iriondo se mostraron superiores por las bandas y entre líneas, pero de nada sirvió, ya que la efectividad de los anfitriones resultó letal. Los de Eusebio Navarro realizaron un trabajo encomiable en defensa y no fallaron en las ocasiones que crearon.

El primer acercamiento fue para los visitantes. Sergio Beato probó fortuna con un disparo que rechazaba en Juanmi, pero su gol era anulado por presunto fuera de juego. Este mismo futbolista lo intentaba de nuevo a la media hora. En esta ocasión, el guardameta Fran despejó el cuero a saque de esquina tras un potente lanzamiento. Un minuto más tarde, Carlitos también tuvo el gol en sus botas, aunque tampoco estuvo fino.

Y para sorpresa del respetable, el Mairena fue el que logró adelantarse en el marcador allá por el minuto 41 del primer tiempo. Un centro de Pana desde la derecha fue bajado al tapete por Suanes y, tras una serie de rechaces, Juan Gómez se encargaba de enchufar un potente disparo que se alojó en el marco del cancerbero azulino. Sin lugar a dudas, un jarro de agua fría para las aspiraciones isleñas en tierras alcoreñas. Y es que, el Mairena se colocaba por delante sin hacer nada del otro mundo.

Control infructuoso

En la segunda parte no cambió demasiado el decorado. El conjunto blanquinegro, ya con el marcador a su favor, se reordenó, aunque el San Fernando siguió mandando. Nada más regresar de los vestuarios, Puli pudo nivelar la balanza pero su remate en boca de gol no llegó a besar las redes, puesto que Fran volvió a erigirse en el héroe de los locales.

Doce minutos después, Carlitos dejó atrás a dos rivales y disparó ligeramente alto y, poco después, era Castillo el que remataba de cabeza a las manos de Fran, que seguía mostrándose inconmensurable. Rodiel tuvo la última ocasión del San Fernando, aunque estaba claro que no era el día de la escuadra de Antonio Iriondo. Los 'cañaíllas' dominaban, cercaban el marco de su rival pero estaban francamente desafortunados.

Por si fuera poco, la puntilla llegó en el minuto 89. Una cabalgada de José Romero confirmó los peores presagios isleños. Y es que, el jugador local cedió el cuero en bandeja a su compañero Suanes, muy activo en los últimos compases de la cita, que sólo tuvo que empujarlo. Un duro mazazo que pudo llegar poco antes de no ser por la inevitable presencia del travesaño, que evitó un remate del propio Suanes ante la salida a la desesperada de Zamora. Fue el aviso de lo que al final se acabó produciendo: el duro castigo al equipo que buscó desde el arranque del partido los tres puntos.

Sea como fuere, el San Fernando ya piensa plenamente en el derbi que mañana (17.00 horas) disputará en tierras isleñas frente al Racing Portuense. Una dura prueba de fuego para la escuadra dirigida por Antonio Iriondo ante uno de los dos equipos, junto al líder Pozoblanco, que todavía no conoce la derrota en la presente edición de la competición liguera.