'Mono Jojoy'. :: REUTERS
ESPAÑA

A la espera del ordenador de 'Mono Jojoy'

El juez Velasco y el fiscal creen que en el material informático incautado al ex jefe de las FARC podrían hallarse nuevos vínculos con ETA

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Existe una «elevada probabilidad» de que en el ordenador de Víctor Julio Suárez Rojas, alias 'Mono Jojoy', el ex jefe de las FARC muerto en un bombardeo del Ejército colombiano el pasado 23 de septiembre, contenga nuevas pruebas que confirmen las relaciones de ETA con el grupo guerrillero y sus entrenamientos conjuntos en la selva venezolana.

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco y la Fiscalía confían en que, al igual que ocurrió con la computadora de 'Raúl Reyes', el número dos de las FARC fallecido en marzo de 2008, el material informático incautado a 'Mono Jojoy' arroje luz sobre la investigación y confirme las declaraciones policiales de los etarras Xabier Atristain y Juan Carlos Besance, quienes reconocieron haber sido entrenados en Venezuela por los etarras Antonio Cubillas y José Lorenzo Ayestarán en verano de 2008.

Para conocer más detalles de la documentación intervenida al ex jefe de las FARC, la Fiscalía solicitó ayer al juez Velasco -encargado de instruir la causa que vincula a ETA con el grupo guerrillero colombiano- que curse una comisión rogatoria a Bogotá. Las autoridades del país latinoamericano ya adelantaron que colaborarán con la justicia española «para luchar contra el terrorismo». Los medios locales colombianos, a su vez, anunciaron que en el lugar del bombardeo que acabó con la vida de 'Mono Jojoy' se incautaron 21 ordenadores y 108 memorias USB y señalaron que ya se habían descifrado los primeros datos.

Interrogatorio

De forma paralela a esta diligencia, el juez Velasco ordenó el pasado 21 de septiembre a la Policía Nacional que se desplazara a Bogotá para interrogar a nueve ex miembros de las FARC y pedirles que detallen sus vínculos con los etarras. La resolución tiene como objeto identificar a miembros de ETA que pudieron participar en entrenamientos armados con el grupo guerrillero.

Los interrogados son militares que se acogieron al plan de reinserción del Gobierno colombiano. Seis de ellos ya declararon a principios de año ante la policía que uno de los etarras identificados era José María Zaldua Corta, fallecido en septiembre pasado en Francia a causa de un infarto.

El juez Velasco citó, además, para el 15 de noviembre a dos testigos propuestos por la acusación popular del proceso, la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) y la Plataforma Democrática de Venezolanos. Se trata de un ex militar y un ex fiscal que declararán como testigos protegidos para aclarar las relaciones entre ETA y las FARC, según fuentes judiciales.

Asimismo, otro ex fiscal venezolano con residencia en Estados Unidos se ha ofrecido por carta al juez para declarar cómo un superior jerárquico del Ministerio Público de Caracas le obligó a tomar decisiones que favorecían a miembros de ETA. La Fiscalía de la Audiencia Nacional tiene que informar ahora sobre la pertinencia de practicar esta diligencia.