Asalto a la zona noble

Olvidadas las dudas iniciales, el Xerez Club Deportivo llega a la sexta jornada de Liga con el propósito de dar el primer zarpazo a la clasificación y meterse de una zancada en la zona noble de la tabla. Con nueve puntos en su casillero y sentado en el octavo escalón de Segunda División, los azulinos se encuentran a sólo dos puntos de la liguilla de ascenso y a tres de la zona de acceso directo a Primera División. Éste parece suficiente argumento de motivación para buscar una cuarta victoria consecutiva que, al mismo tiempo, confirme la línea ascendente que traen los hombres de Javi López desde que lograran vencer al Elche en el duelo perteneciente a la Copa del Rey. Desde aquel encuentro, los xerecistas no han hecho otra cosa que ganar, ganar y ganar. No siempre con buen juego, pero sí sumando de tres en tres. Algo que le está haciendo escalar en la clasificación al mismo ritmo que crece la moral de un equipo que ya en la segunda parte del derbi contra el Córdoba comenzó a ofrecer los primeros destellos de ese fútbol trenzado que busca Javi López.

Precisamente la última jornada, durante el partido que el Deportivo jugó contra el Tenerife, Chapín pudo ver al fin el fútbol que persigue el preparador azulino: posesión y paciencia para que aparezcan los huecos en ataque. Y es que esa es la cantinela que no se cansa de repetir Javi López durante los entrenamientos de un Xerez que llega a Tarragona en línea ascendente.

Los azulinos son conscientes de la dificultad que supone lograr una cuarta victoria consecutiva, así como lo complicado que puede ser repetir triunfo en un estadio en el que ya ganaron hace cosa de un mes en Copa del Rey. Aquel primer partido copero de la temporada fue disputado, igualado, pero se decantó a favor de un Xerez que llegaba herido tras el palo inicial ante el Cartagena.

Ahora el Deportivo que llega a Tarragona poco tiene que ver con el que eliminó al Nàstic a pesar de que apenas han pasado treinta días de aquel encuentro. Aunque Javi López no lo quiera reconocer (por aquello de la motivación), el preparador catalán ya ha encontrado el once tipo, la base de su equipo, pues casi con total seguridad repetirá alineación por tercera semana consecutiva.

Por tanto, se mantendrá el dibujo y los hombres que han ganado al Córdoba y al Tenerife. Es decir, Lledó repetirá bajo palos pese al trabajo y las palabras de Chema. En la línea defensiva no se vaticinan cambios por lo que los laterales volverán a ser ocupados por Mendoza (poco a poco acercándose a su mejor versión) y Juan Luis Redondo (precisamente en Tarragona aprovechó la oportunidad que le dieron y desde entonces no ha salido de la alineación titular en Liga). El centro de la zaga será tapada por Vicente Moreno y David Lombán.

El equilibrio en la zona ancha lo tratarán de poner Rafa Barber y Miguel Ángel Cordero. Precisamente, mucha culpa de la mejoría azulina la tiene la aparición del lebrijano. El medio centro llegado del Castilla ha sido el pilar sobre el que ha comenzado a creer este nuevo Xerez. Obviamente, no ha sido la única clave del cambio, pues no se puede olvidar la aportación de José Mari (segundo punta), la evolución de Pablo Redondo (derecha) o la calidad de Capi (izquierda), pero lo cierto es que Cordero le ha dado mucha más seriedad a un centro del campo que a comienzos de temporada a duras penas daba tres pases seguidos. El once lo completará Mario Bermejo. El cántabro tratará de reencontrarse con el gol e incrementar su saldo de dos tantos logrados en los dos primeros partidos de Liga.

Convocatoria

El banquillo de los azulinos tampoco ofrecerá grandes cambios. Realmente, sólo hay uno significativo que es la vuelta de Capdevila en detrimento del jerezano José Vega. La otra variante es la vuelta de Chema que recupera su puesto en el banco tras superar las molestias que le impidieron entra en la lista la semana pasada. El resto de la convocatoria la completan Gerard, Llorente, Héctor Font, Óscar Díaz y Antoñito.

Sí asoman cambios en el Nàstic de Tarragona. Luis César Sampedro está obligado a realizar variantes tras tres derrotas en las que ni tan siquiera han logrado marcar. El diagnóstico del conjunto catalán no es bueno, pero ni mucho menos hay que darle por muerto porque los tarraconenses están apostando por una atractiva propuesta de fútbol que, de momento, no está teniendo recompensa. Además, están sufriendo un importante número de lesiones que les están impidiendo levantar cabeza. A su favor cuentan con el retorno del ex cadista Morán. Su vuelta a la media punta ha generado una gran expectación, pues la afición del Nástic tiene una gran confianza en el cántabro. Seguramente también habrá novedades en la punta de ataque ya que el holandés Powel no termina de convencer a un Luis César que podría apostar por el canterano Eloy para el puesto más adelantado del Nástic.