Zapatero desprecia la oferta de ETA para negociar el fin de la violenciaHallan un zulo con 19 placas de matrícula
Socialistas, populares y el PNV responden a la banda que el único anuncio válido es el cese definitivo del terrorismo
MADRID/VITORIA. Actualizado: GuardarJosé Luis Rodríguez Zapatero despreció ayer el nuevo emplazamiento negociador realizado al Gobierno por ETA, que a través de una entrevista en 'Gara' le exige una serie de cesiones para que la banda terrorista se plantee convertir el supuesto «alto el fuego» actual en «permanente».
El presidente del Ejecutivo, que participó en un mitin en Zaragoza, no dedicó ni uno solo de los 45 minutos del discurso a la entrevista de seis páginas publicada por el diario radical ni tampoco realizó una sola referencia al acto protagonizado un día antes en Gernika (Vizcaya) por Batasuna y otros partidos independentistas vascos, en el que reclamaron a la banda una tregua «permanente y verificable» -con voluntad de abandono de las armas- y, a su vez, pidieron al Gobierno unas concesiones similares a las planteadas por los terroristas para que pudiese arrancar un nuevo proceso de paz. Entre las exigencias está la legalización y participación electoral de Batasuna, el fin de la política penitenciaria específica y más dura para los etarras y el inicio de una negociación política para el reconocimiento del derecho de autodeterminación al País Vasco y Navarra.
Mensaje de firmeza
La actitud mantenida ayer por Zapatero fue idéntica a la del domingo 18 de septiembre, cuando en otro mitin en Barcelona tampoco dedicó un solo segundo y ninguneó el comunicado emitido ese día por ETA, en el que la banda aclaraba que estaba dispuesta a que mediadores internacionales participasen en el proceso de diálogo que pretendía poner en marcha con la tregua anunciada unos días antes en un primer escrito.
El mensaje que pretende transmitir Zapatero a ETA con sus silencios es que el Gobierno ya no está dispuesto a valorar ningún comunicado o entrevista salvo que anuncie el abandono definitivo e incondicional del terrorismo, porque su gabinete no va atender ni a más treguas ni va a iniciar otros procesos de diálogo para el final de la violencia como los que fracasaron en 1999 y 2007. Fuentes socialistas insistieron en que la única política anti-ETA que se va a desarrollar es la de la «firmeza», la de la persecución de la banda hasta su desaparición y la que mantendrá a Batasuna ilegal y fuera de las instituciones salvo que ETA deje los asesinatos o la izquierda 'abertzale' se desligue de forma clara de la banda y condene sin paliativos sus atentados.
Quienes sí abordaron ayer las declaraciones de la banda fueron el PSOE, el PP y el PNV. Los tres coincidieron en un punto esencial: ningún emplazamiento de la banda tiene ya interés salvo el que anuncie su autodisolución. La secretaria general de los populares, Dolores de Cospedal, aseguró que «a ETA le decimos que los demócratas no aceptamos condiciones de los terroristas, pero sí les imponemos tres fundamentales: que abandonen las armas, que lo hagan de manera definitiva y que pidan perdón a todas sus víctimas». El responsable del PP vasco, Antonio Basagoiti, dijo que es «esencial» la unidad antiterrorista, «ser implacables hasta el final» de la banda, quitarles la esperanza de negociación e impedir que Batasuna se «cuele» en las elecciones.
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, en su discurso del Alderdi Eguna (Día del Partido) en Vitoria se mostró partidario de impulsar un proceso político para terminar con el terrorismo y lograr la «normalización política» en Euskadi, pero marcó como punto de partida indispensable el fin de ETA -«no vale el alto el fuego que no sea cese definitivo»- y la «disociación manifiesta» de la violencia por parte de Batasuna, nada parecido a la «escenificación» que cree que realizan ahora. Urkullu indicó que, si se abre el «nuevo escenario político», los pasos a dar serían la vuelta a legalidad de Batasuna y el inicio de una negociación entre todas las fuerzas vascas «sin exclusiones» de un nuevo estatus político para el territorio que recoja los derechos históricos y el derecho a decidir de sus ciudadanos. Dijo estar dispuesto a dar tiempo y apoyo político a Zapatero si apuesta por ese camino.
Las fuerzas de seguridad francesas encontraron ayer un pequeño 'zulo' de ETA en Montaud (sur de Francia) con 19 placas de matrícula, según informaron fuentes de la lucha antiterrorista. Algunas de las placas de matricula, según las mismas fuentes, estaban muy deterioradas, lo que hace pensar que el escondite había sido abandonado. En el reverso de otras aparecía una inscripción en euskera sobre el modelo de coche.