El guardián de los Ibis Eremita
Medio Ambiente otorga el Premio al Compromiso a Salvador Domínguez, integrante del proyecto de recuperación que coordina el Zoo de Jerez
JEREZ. Actualizado: Guardar«He nacido en el campo y me quiero morir en el campo». Precisamente en plena Sierra del Retín estaba Salvador Domínguez cuando el consejero de Medio Ambiente en persona le comunicó por teléfono que le habían dado el Premio al Compromiso Ambiental, un galardón que concede cada año desde hace 15 la Junta de Andalucía a diferentes iniciativas de cuidado de la naturaleza. «Yo estoy un poco en la higuera y ni siquiera sabía que existía este premio. Tengo que ir a recogerlo a Sevilla», dijo todavía con sorpresa.
«Cuando uno se esfuerza en su trabajo, que te den una palmadita de reconocimiento es bastante bueno», continuó el auxiliar de Egmasa (Empresa de Gestión Medioambiental). El proyecto Eremita nació en 2004 entre la Consejería de Medio Ambiente y el Zoo de Jerez y desde entonces Salvador forma parte de él. «Estoy muy contento porque intento esforzarme y procuro hacerlo lo mejor posible. Yo he sido ganadero toda mi vida y lo dejé para dedicarme a los pájaros», aseguró el premiado.
De hecho, la afición le viene de lejos y ya de pequeño su padre lo apodó 'El niño de los pájaros' cuando construyó sus primeras pajareras en el pueblo malagueño en el que nació. «Cuando me hablaron del proyecto no conocía al Ibis Eremita y me fui al Zoo de Jerez a verlo. Es raro y al principio puede parecer un poco feo. Se queda calvo, le sale un moño de plumas en la parte de atrás y tiene un pico muy largo», contó entre risas.
Salvador Domínguez y el técnico Borja Rodríguez se encargan del cuidado y vigilancia de los ejemplares en la Sierra del Retín, en el termino municipal de Barbate. «Cada día voy a por la comida, la preparo, limpio las pajareras y, junto con mi compañero, hacemos un seguimiento de los pájaros que están en libertad. También hay que rastrear y buscar nidos», añadió.
También tuvo palabras de agradecimiento para sus compañeros y jefes: «Que me hayan dado un premio significa que hay un buen equipo en el que cada uno aporta su granito de arena. Ellos confían en mí y yo en ellos y se lo agradezco mucho a todos».
Un proyecto con resultados
El proyecto Eremita comenzó en el año 2004 con una veintena de pollos. Estas aves no se reproducen hasta los cuatro años por lo que los primeros resultados tardaron en llegar. «Fue una gran alegría ver que los pájaros se iban solos al Tajo de Barbate a criar. Sabíamos que era el mejor lugar para hacerlo», contó Salvador. El año pasado volvieron a nacer polluelos y también esta temporada.
Ahora son 54 los ejemplares que viven en plena libertad en El Retín y «el año que viene habrá cuatro o cinco parejas reproductoras más». La población seguirá creciendo ya que está previsto soltar unos 40 pollos en los meses de noviembre y febrero. «Las previsiones se están cumpliendo», aseguró el galardonado con cierto orgullo.
Además del equipo fijo del proyecto en El Retín, durante el verano acuden grupos de voluntarios cada quince días «que hacen una labor también muy importante», según Salvador.
Otros premiados
Estos premios, convocados por la Consejería de Medio Ambiente, reconocen a todas aquellas personas, colectivos y empresas que han destacado en la defensa y desarrollo de los valores medioambientales en distintas disciplinas y actividades.
En la modalidad de empresa y medio ambiente el premio ha sido para la multinacional sevillana Abengoa, por su apuesta por el desarrollo sostenible. En la modalidad de comunicación ha sido galardonado el estudio especializado en infografía y animación Kandor Graphics, que produjo 'El lince perdido'. También han sido premiados el Ayuntamiento de Sevilla, la Comunidad de Regantes 'La Laguna' (Baeza), la campaña de WWF/ADENA 'Apaga la luz, enciende el planeta', los Grupos de Desarrollo Rural de Los Pedroches y Sierra Morena (Córdoba) y la investigadora Astrid Vargas, por su intensa labor divulgativa.