Cuatro muertos tras una explosión y un tiroteo en un hospital alemán
BERLÍN. Actualizado: GuardarAl menos cuatro personas murieron ayer en Lorrach, en el suroeste de Alemania, dos de ellas por una explosión en una vivienda y las otras dos en un tiroteo posterior provocado por una mujer en un hospital, supuestamente desencadenado por un drama familiar. Los muertos en el edificio de viviendas son un hombre y un niño, según precisaron fuentes policiales, mientras que las víctimas mortales del tiroteo en el hospital católico de Santa Elisabeth fueron la presunta agresora, que fue abatida por la policía, y un enfermero.
Según las investigaciones, la mujer irrumpió sobre las 18.00 horas en el recinto del hospital procedente de un edificio de viviendas vecino donde se había producido una explosión, seguida de un incendio. La asaltante iba armada con un arma automática y abrió fuego a discreción, según la policía debido a un acto desesperado precipitado por un drama familiar anterior.
Un policía que se encontraba en el centro por motivos privados resultó herido de gravedad, aunque se encuentra ya fuera de peligro, al recibir un balazo en una rodilla. Otras tres personas, pacientes del hospital, resultaron también heridas de diversa consideración.
Dotaciones de policía acudieron al centro y acordonaron la zona. La asaltante, cuya identidad y supuestos móviles se desconocen, abrió fuego contra los agentes, que respondieron a la agresión y la mataron. Poco después, controlado el incendio en el vecino edificio de viviendas, la policía halló en su interior los cadáveres de un hombre de mediana edad y un niño, según las primeras investigaciones relacionados con la mujer.
El hospital de Santa Elisabeth está especializado en ginecología, pediatría y maternidad y tiene una unidad de psiquiatría infantil y juvenil.