Las obras de reforma del paseo de la Victoria terminarán en diciembre

La remodelación del parque de la Victoria estará terminada el próximo diciembre. La segunda y tercera fase del proyecto, que se ejecutan a la vez con un presupuesto de 380.000 euros, cuenta con la opinión de los vecinos de la Zona Norte, quienes se posicionaron en contra de las primeras actuaciones que se hicieron, por la pérdida de elementos históricos en este espacio verde. El alcalde, Enrique Moresco, se ha comprometido a no recepcionar las obras hasta que los vecinos no den su visto bueno.

Los presidentes de las asociaciones de las barriadas de Sudamérica, San José, Los Frailes, Altos de la Bahía, Ronda de Valencia, Palmar de la Victoria, Barrio Obrero y El Tejar, entre otros, inspeccionaron las obras junto al regidor popular y su concejala de Medio Ambiente, Blanca Merino. Cabe recordar que este parque ya fue objeto de una inversión de 300.000 euros con cargo a las arcas municipales que levantó una intensa polvareda, porque los vecinos se mostraron en total desacuerdo con el proyecto que el Ayuntamiento contrató con el arquitecto Ramón Pico.

Los vecinos toman partido

Éste incorporó un conjunto de elementos modernos que no cuadraron con las expectativas de los residentes, quienes consideraron que no respetaba el carácter romántico de un parque del siglo XIX, que forma parte del patrimonio histórico de El Puerto.

En este punto se paralizó la obra, que recientemente fue retomada con cargo al nuevo Plan E. En este sentido, Moresco insistió en que no se ha tirado el dinero público, ya que la primera fase supuso la dotación de canalizaciones de agua y otras infraestructuras como el alumbrado y el cerramiento completo del jardín, que se han mantenido. No así con el estanque a ras de suelo, que ha sido tapado.

Las pérgolas, sin embargo, se han mantenido, y en el lugar que ocupaba la Fuente de los Patos, cuya eliminación indignó mucho a los vecinos, se ha levantado una rocalla de piedra similar, pero sin el hueco donde se refugiaban los animales. Las autoridades municipales argumentaron que con esto se evita el acceso a indigentes y toxicómanos. Una explicación que no convenció demasiado a los representantes vecinales. Entre otras cosas, éstos solicitaron sobre el terreno que se amplíe la iluminación con más farolas. Algo que tendrá que autorizar la delegación provincial de Cultura. Del mismo modo, solicitaron que se repongan las réplicas de las cuatro estatuas de mármol de la entrada. Dos de las originales se encuentran en el museo de la ciudad.

Por un horario flexible

Por otro lado, los vecinos comprobaron el estado embrionario de ejecución del parque infantil y del ambigú, dos elementos que completarán la oferta para que los vecinos del entorno hagan uso del parque tras un prolongado abandono. En este sentido, el presidente de la plataforma de la Zona Norte, Enrique Valle, expresó el deseo vecinal de que el horario del parque se adapte a las necesidades de los vecinos y que este goce de la suficiente vigilancia. «Aquí viven muchas personas que vendrán a tomar el aire en verano, con los niños... y hay que atender esa demanda».