Prisión para los nueve «comisarios políticos» detenidos el martes
MADRID. Actualizado: GuardarEl juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska considera que los nueve dirigentes de Ekin detenidos el martes son «verdaderos comisarios políticos» que «velan por la ortodoxia» impuesta por ETA y dinamizan las distintas asociaciones ilegales de la izquierda abertzale bajo las directrices de la banda. Así consta en el auto dictado ayer por el magistrado en el que se ordena el ingreso en prisión incondicional para los nueve miembros del aparato político de la banda, arrestados en la primera operación desde que ETA anunciara el cese de sus «acciones armadas ofensivas».
Grande-Marlaska asegura que documentos intervenidos en sucesivas operaciones «constatan en la actualidad la continuidad de Ekin como la estructura que, bajo la dirección de ETA, es la responsable de dirigir, coordinar y dinamizar al conjunto de organizaciones que forman la denominada izquierda abertzale».
Una continuidad que, explica el juez, se ha ido adaptando a las «necesidades actuales» del entramado, de forma que, para ejercer ese papel dinamizador, ha mantenido dos estructuras organizativas propias: una que ejerce la dirección y de la que forman parte los nueve detenidos, y otra sectorial. La estructura directiva, detalla, se divide en otras «pequeñas y restringidas» con pocos militantes pero «muy cualificados»: «dirección nacional o jefatura», que es la que «verdaderamente controla, dinamiza y traslada las órdenes de ETA»; una «dirección de herrialde», que ejerce su función en las tres provincias vascas y Navarra y, finalmente, otra a nivel comarcal o local.
El auto señala a Aniaiz Ariznabarreta como la «responsable nacional» de la «red de relaciones» de Ekin con la izquierda abertzale y, junto a Ugaitz Elizarán, del entramado en Guipúzcoa. Rosa Iriarte Laset, Eneko Compains Silva y José Aldasoro Jáuregui se sitúan como cabecillas en Navarra; Egoizt Garmendia Vera y Urko Asier Ayerbe Sarasola en Álava, y Sandra Barrenetxea Díez y Erika Bilbao Barcena en Vizcaya. El texto contabiliza también 38 reuniones de Ekin en los últimos meses.
Grande-Marlaska destaca la importancia del documento intervenido a Aldasoro. Un acta de una reunión de Ekin en el que se asegura que, con su reacción al comunicado de ETA, Batasuna «dijo lo que la Organización no dijo». A éste se suman otros como el que menciona un encuentro en enero entre representantes de Batasuna y líderes del colectivo de presos.
En dicha cita los primeros aseguraron que la ponencia 'Clarificando la fase política y la estrategia', redactada en octubre de 2009, «contaba con el visto bueno de EKIN antes de su difusión». Se desprende, según el juez, la «dinamización de las organizaciones de la 'izquierda' abertzale por Ekin y su enorme influencia» en las mismas, «que acatan disciplinadamente las decisiones que les vienen impuestas, anulando el debate interno». Califica así a los nueve detenidos de « comisarios políticos que velan por la ortodoxia de la línea marcada por ETA».