Un paso al frente en el Cuvillo

Un decepcionante Cádiz B fue derrotado por un Portuense que, sin llegar a alcanzar el nivel de las dos primeras jornadas, sí se mostró superior al filial gaditano de Ángel Oliva. Se rompió así una racha de 21 años, desde el 89, en que el Portuense no derrotaba en partido oficial al pequeño submarino amarillo.

En la primera mitad sólo hubo un equipo que se hiciera ver, aunque sin llegar a encandilar a sus seguidores, el Portuense. Dos jugadas significativas tuvo el conjunto de Paco Corbeto, hasta llegar al descanso sin que llegara a acertar con la red de Juanfer. Migajas de dos equipos que hasta entonces estaban colocados en lo más alto en la tabla y que habían despertado expectación.

Si no llega a ser porque el Portuense puso en la reanudación mayor ímpetu en el juego, los espectadores se hubieran marchado del campo. Pero los de Corbeto se sobrepusieron a la apatía amarilla. El viento a favor también le favoreció a los locales, que manejaron con mayor perfección la bola en los lanzamientos a balón aparado. Mientras el Portuense jugaba en campo contrario, al filial gaditano parecía que poco o nada le iba en el envite.

Ya avisó Pedro Curtido con un lanzamiento desde fuera del área a la cepa del poste de Juanfer, desde muy lejos, que no fue gol por poco. Posteriormente, por el carril central, José Antonio no pudo controlar el esférico dentro del área grande, en quizás la jugada más clara de peligro de todo el encuentro.

Tanto fue el cántaro a la fuente hasta que se rompió y merecidamente. En una jugada que en principio no debió tener peligro, en un balón colgado se quedó sólo Villalustre que con cierta facilidad cabeceó a la red con la testa.

Tras el gol, el Portuense jugó más cómodo por la apertura de las líneas del rival. Fueron pasando los minutos hasta que en las postrimerías del mismo el Cádiz B traspasase la línea de medio campo, pero todo en balde. Únicamente en el 85 de partido, Javi Catalán, se atrevió a probar fortuna con un lanzamiento raso a las manos de Edu Villegas en lo que era un balón demasiado inocente.

Ningún 'pero' se le puede poner al triunfo de los hombres de Paco Corbeto, que llevan un magnífico comienzo de liga instalándose tras tres jornadas entre los cuatro primeros de la tabla.