![](/cadiz/prensa/noticias/201009/13/fotos/3291992.jpg)
Deje el currículum y ya le llamaremos
CÁDIZ. Actualizado: GuardarLa ruta del currículum es la siguiente: empieza con un resumen de la vida laboral en apenas dos folios grapados. Se hacen unas veinte copias y la primera semana se reparten en mano -siempre es mejor presentarse en persona-. Conforme avanza el mes, el desánimo le gana al optimismo y se termina por enviar el resto a través del correo electrónico. La última opción es recurrir a los conocidos para pedir que medien con su jefe por si quedara alguna vacante.
Luego vienen las entrevistas y la eterna pregunta de la experiencia profesional. Cuando aún no se ha pasado de los treinta, el apartado de formación duplica al del recorrido laboral. Becas, prácticas y un verano como camarero o socorrista. Eso es todo. Pertenecen a la generación mejor preparada de la historia que pide trabajo en el año del paro. La tasa supera ya el 40% en la provincia, diez puntos por encima de la general y amenaza con subir conforme el otoño se acerca.
La situación es de sobra conocida y los sindicatos empiezan ya a alertar de un abuso de la temporalidad y los contratos basura en la mano de obra joven. Este mismo verano CC OO ha presentado el estudio 'Juventud andaluza y empleo' en el que analiza la situación de los que aún no han cumplido los 35 durante los años duros de la crisis. En lo que respecta a Cádiz, llega a reservar un espacio para hablar de los menores de 25 años, cuya tasa de paro supera el 57%. En ese volumen no se incluyen a los estudiantes ni a los que ya no buscan trabajo, que podrían alterar la estadística. Son los que acaban de salir de la carrera o han estudiando un grado de FP. Sin olvidar a los más castigados por la recesión: aquellos que cambiaron los libros por subirse al andamio y empezar a ganar dinero nada más terminar la Secundaria.
Abuso de la temporalidad
En la última valoración de los datos del desempleo, los líderes provinciales de CC OO y UGT, Manuel Ruiz y Francisco Fernández, respectivamente, alertaron del «abuso de los contratos temporales», especialmente entre los trabajadores más jóvenes. «Y aún no se ha aprobado la reforma laboral, ¿qué nos cabe esperar?», se preguntan.
El Ministerio de Trabajo ofrece los datos que se pueden constatar en la calle. De los 7.324 contratos que se realizaron en agosto a gaditanos menores de 25 años, 7.127 fueron temporales. Por supuesto, de estos últimos, la mayoría se hicieron de manera eventual por circunstancias de la producción o por obra y servicio.
Al menos el verano favorece al colectivo, que consigue reducir el desempleo, aunque sea sólo durante los meses de calor, tal como constata el registro del SAE.
Otras tipologías que viene a perpetuar esta carrera del empleo basura son las prácticas o la formación. Durante el pasado mes se llegaron a realizar 179 de ambos tipos en la provincia. Son productos exclusivamente pensados para los jóvenes y la mejor prueba de ello es que en otros tramos de edad quedan totalmente desiertos.
La seguridad del título
Los titulados universitarios o los que siguieron la opción del máster también se encuentran con una dura situación. Según la EPA, su tasa de paro supera el 14% y ya alcanza a profesionales de amplia salida laboral como las ingenierías o la dirección y administración de empresas. La consultora Adecco certifica que ambas siguen entre las carreras con más posibilidades, pero ya empiezan a encontrar obstáculos.
Los más golpeados por la crisis han sido los aparejadores, que eran demandados por las empresas antes incluso de que salieran de la facultad y los ingenieros técnicos industriales. Casi 6.000 de estos profesionales están inscritos en las oficinas del Inem de toda España. También lo tienen duro los que eligieron una profesión relacionada con la comunicación o la gestión cultural.