La gastronomía estará presente en las Fiestas de la Vendimia. :: L. V.
Jerez

Vino y tapa por dos euros

Hasta 11 establecimientos se adhieren a esta estrategia durante estas fiestas; 'Vendimiando en los bares del centro' propone acompañar el vino de Jerez con hasta cuatro variedades de un oportuno maridaje

JEREZ. Actualizado: Guardar
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El jerez «puede ser un vino difícil» a criterio de la delegada de Cultura y Fiestas, Dolores Barroso. Pero si aquellos visitantes poco acostumbrados a sus matices se lanzan a probarlo «acompañado del plato o de la tapa que mejor le casa», entonces se lograría dar en el clavo: «Seguro que volverá a Jerez y se llevará una botella a su casa». Ahora, tanto turistas poco hechos al vino como los jerezanos más avezados podrán hacerlo por el módico precio de dos euros.

Al menos, y mientras duren las Fiestas de la Vendimia que hoy comienzan, así será en los 11 negocios que se han prestado a ser partícipes de la iniciativa de Acoje 'Vendimiando en los bares del centro', que se alarga hasta el próximo domingo 12 de septiembre. Aunque en un principio se pretendía que fueran 25 los bares participantes «había que cerrar cartel», explicó ayer Fernando García, presidente de los comerciantes de Jerez (Acoje).

«Sabíamos el esfuerzo que teníamos que hacer por el momento económico, pero pensando precisamente en la crisis preguntamos a nuestros hosteleros qué esfuerzos podían hacer para llegar a nuestros consumidores», explicó García. A pesar de las ausencias, todavía se prevé que en los próximos días sean algunos más los negocios que se adhieran a esta estrategia.

Tras la presentación de la campaña de ayer, de inmediato se iniciará el reparto de 3.000 folletos en los que aparecen los establecimientos acogidos, que probablemente se ampliarán en otra partida similar en los próximos días. En todos los bares participantes podrán elegirse desde una hasta cuatro variedades de tapa, que abarcan ejemplos como chorizo picante con roquefort, alpaquita a la cuadra, cazón en adobo, carrillada ibérica, croquetas caseras o un auténtico clásico de la gastronomía autóctona: los riñones al jerez. A todas ellas se ha referido la delegada al compararlas con «el menú de degustación de una boda, la carta que puede ofrecer la ciudad».

Ni bus ni aparcamiento

«No es que los tengamos olvidados». Barroso se dirige así a los hosteleros de la periferia, a quienes avisa de que los tendrán en cuenta para futuras iniciativas. Sin embargo, son los clientes de las barriadas y la zona rural los que tendrán difícil llegar al centro por la huelga -ahora aplazada al día diez- de autobuses urbanos, pero también por el elevado coste del estacionamiento privado. «Para la programación del año que viene llegaremos a un acuerdo con los aparcamientos», anuncia la delegada de Cultura.