La guerra de los peajes

La proximidad de las municipales y la sequía presupuestaria sigue contagiando el anuncio de exóticas medidas. Si en La Línea, gobernada por el PP, prosiguen las obras para cobrar en octubre una tasa a quienes crucen a Gibraltar, en Algeciras, cuya corporación es de mayoría socialista, se sigue dicho proceso por si cupiera exigir una tasa similar a la Operación Paso del Estrecho. ¿De qué estamos hablando, de exigirle dinero a los migrantes magrebíes por volver a casa en vacaciones o de reclamar al Gobierno una ayuda para afrontar dicho tránsito? Los trabajadores municipales linenses están encerrados porque no cobran sus salarios y el Gobierno quizá podría zanjar esa crisis a cambio de descongelar la Carta Económica Especial del municipio que ha hecho que la ciudad pierda 30 millones de euros. Claro que también ayudaría que el alcalde Alejandro Sánchez y los concejales se recortaran sus galácticos sueldos. Quizá la búsqueda de renovar como candidato, haya hecho que el presidente de la Corporación de Algeciras, Tomás Herrera, se deje contagiar por la sinrazón. Con las fronteras no se juega.