MUNDO

El líder norcoreano viaja a China para presentar a su hijo como sucesor al frente del régimen

PEKÍN. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Mientras Jimmy Carter, presidente de Estados Unidos entre 1977 y 1981 estaba en Corea del Norte intentando liberar a un americano que entró clandestinamente en el país, su caudillo, Kim Jong-il, podría haber viajado a China con su hijo Jong-un, a quien todos los analistas internacionales apuntan como su sucesor.

Dos profesores de la escuela de Yumen, en la provincia china de Jilin, confirmaron ayer que el 'Querido Líder' había visitado durante 20 minutos el centro educativo. Según fuentes diplomáticas citadas por la agencia surcoreana Yonhap y la televisión YTN, el motivo de este segundo viaje a Pekín en lo que va de año sería presentar a las autoridades a su vástago para allanarle el camino en el relevo del poder. El próximo mes tendrá lugar en Pyongyang una trascendental reunión del Partido de los Trabajadores de la que saldrán las nuevas figuras del régimen norcoreano, donde Kim Jong-un podría ser ascendido a un importante cargo en el Gobierno.

Los rumores sobre la sucesión del 'Querido Líder', que tiene ya 68 años, se han disparado desde que sufriera una apoplejía en agosto de 2008. Aunque Kim Jong-il parece haberse recuperado y ha vuelto a prodigarse en apariciones públicas, los servicios secretos y expertos de medio mundo continúan especulando sobre su salud y cada uno de sus movimientos. El mandatario norcoreano hace pocos viajes al extranjero, y siempre tienen como destino China, país del que tiene una fuerte dependencia económica. Cuando viaja, siempre lo hace en un tren privado ya que se cree que volar en avión le produce pánico.

Preparación

La nueva visita al gigante asiático -su único valedor político- serviría para aleccionar a su joven hijo, de poco más de 20 años, antes de que tome las riendas de Pyongyang. Para ello, una de las escalas del viaje habría sido el colegio de Yumen, donde el padre de Kim Jong-il y fundador de Corea del Norte, el difunto presidente Kim Il-sung, estudió entre 1927 y 1930. Su familia se refugió allí para huir de la ocupación japonesa. En Yumen, Kim Il-sung comenzó a imbuirse en la ideología comunista.

Más que una nueva visita a China, lo que se esperaba era una entrevista de Kim con Jimmy Carter, al igual que ocurrió el año pasado cuando el también ex presidente de EE UU Bill Clinton voló a Pyongyang para liberar a dos periodistas norteamericanas.