La trampa más usual es aportar un domicilio donde no se reside

Es algo que hacen muchos padres. Empadronarse seis meses antes en casa de los abuelos, e incluso alquilar una vivienda cerca del colegio soñado. Sin embargo, en el caso del CEIP La Barrosa este tipo de estratagemas han salido mal a algunos progenitores. La Policía Local ha destapado casos evidentes, como el de una familia que acreditó residir en una casa que vendieron hace varios años.