Más de un año sin centro cívico

Iniciativa Progresista Jerezana ha salido a la palestra para denunciar que, después de trece meses, «aún no se ha dado una solución a los diferentes colectivos que ocupaban el Centro Cívico 1º de Mayo». La formación política pone sobre la mesa así, de nuevo, un conflicto que afecta directamente a varias entidades vecinales de la ciudad.

El mismo se remonta al 9 de julio de 2009, cuando el Ayuntamiento cerró temporalmente el equipamiento a instancias de la Inspección de Trabajo. Y es que ésta había dado buena cuenta de unos graves problemas arquitectónicos en el edificio, que presentaba multitud de grietas. El personal municipal que realizaba sus labores en esta instalación se trasladó a otras dependencias municipales. Diferentes colectivos vecinales, sin embargo, se quedaron sin local para sus respectivas sedes y sin espacio para organizar actividades. Era el caso de Juan XXIII, el Barranco, Verde Esperanza y los Naranjos. Todos ellos, en consecuencia, se quedaron sin lugar para reunirse u organizar los diferentes actos, tanto lúdicos como formativos, con los diferentes talleres que se llevaban a cabo en los salones del local.

Las causas

La Delegación de Urbanismo encargó entonces, a la empresa Vorsevi, un estudio técnico para determinar las causas que habían provocado el deterioro registrado en el edificio. Las conclusiones apuntaban como causas de la aparición de las grietas a problemas constructivos registrados en la cimentación del mismo, descartándose que se debieran a problemas de mantenimiento.

El órgano municipal también anuncio que había encargado un proyecto de nuevo centro por si las medidas correctoras que se determinasen en el mencionado estudio eran excesivamente costosas para las arcas municipales.

Sin embargo, nada se ha vuelto a saber desde entonces. Se desconoce, incluso, si el Consistorio ha optado definitivamente por alguna de las dos alternativas planteadas, o si, por el contrario, ha dejado ambas guardadas en el cajón de los proyectos olvidados.

Por todo ello, Antonio Conde, concejal de IPJ, insta a la alcaldesa, Pilar Sánchez, «a dar una solución definitiva a los colectivos que utilizaban los locales del Centro Cívico 1º de Mayo, bien con la rehabilitación de éste o con la nueva construcción de uno nuevo que cubra las necesidades de estos colectivos». Se suma, de esta manera, a las reivindicaciones formuladas en repetidas ocasiones por las entidades directamente afectadas por el cierre de la instalación.