Detienen a dos etarras que captaron a nuevos miembros para la banda

Agentes de la Policía Nacional detuvieron ayer en Tarragona y Guipúzcoa, respectivamente, a los etarras Zugaitz Izaguirre y Regina Maiztegi por orden de la Audiencia Nacional, que reclamó su busca y captura e inmediato ingreso en prisión para cumplir las penas de siete (él) y seis años de cárcel por pertenencia a la banda terrorista a que fueron condenados el pasado mes de mayo. Los arrestados elevan a 59 los etarras detenidos desde el comienzo de año, 35 de ellos fueron capturados en España y los otros 24 en Francia, Portugal, Gran Bretaña y en varios países americanos.

Las detenciones se ejecutaron por miembros de las brigadas antiterroristas de la Policía Nacional en Barcelona, Tarragona y San Sebastián, coordinados desde Madrid por responsables de la Comisaría General de Información. Los dos arrestados fueron detenidos hace siete años en una gran redada contra el subapararo de captación de ETA que se saldó con doce arrestos, y se encontraban hasta mayo en libertad provisional a la espera de sentencia.

El tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia Nacional condenó el 7 de mayo pasado a Izaguirre -por integración en la banda- y a Maiztegi -por colaboración-, junto a otras tres personas, por formar parte del subaparato de captación. Esta estructura tenía como misión la preselección en las tres provincias vascas y Navarra de futuros terroristas y la entrega de las cartas para las citas de reclutamiento en Francia con los miembros de la d rección, así como la constitución de comandos 'legales', con terroristas no fichados, para recopilar datos e informaciones con los que poder planificar y cometer atentados.

De hecho, la sentencia indica que Izaguirre se integró en 2000 en el 'comando Ezkurra', tras ordenárselo durante una cita en Francia el entonces jefe militar de ETA, Ibon Fernández Iradi, con la misión de facilitar a la banda información para atentar sobre torretas y antenas de electricidad y telecomunicaciones y edificios oficiales. Durante el juicio no quedó probado si facilitó información a la dirección de ETA.