Los ayatolás rechazan dialogar con Obama
TEHERÁN. Actualizado: GuardarEl ala más conservadora del régimen iraní insistió ayer en que ni siquiera el diálogo es posible con Estados Unidos. El ayatolá Ahmad Janati ejemplificó esta postura durante la lectura del sermón de Teherán, el texto religioso que difunde las opiniones de las autoridades islámicas. «Creéis que ellos han cambiado, ellos siguen siendo los mismos y no dejan de enemistarse con nosotros», subrayó Janati en una velada referencia a la reciente propuesta de Mahmud Ahmadineyad a la Casa Blanca para reunirse cara a cara con Barack Obama.
A juicio de las autoridades religiosas persas, no existe margen para el acuerdo con Washington. «¿Habéis olvidado su crímenes?», se preguntó el ayatolá durante el sermón de Teherán antes de recordar que las sanciones impuestas por la comunidad internacional «no van a tener efectos». El presidente iraní, sin embargo, planteó abiertamente debatir con Obama en el marco de la Asamblea General de la ONU, una cuestión que la Casa Blanca rechazó de plano.
Aunque al principio de su mandato Obama apostó fuerte por la negociación con Irán, en los últimos meses el mensaje ha sido mucho más contundente. Al margen de promover nuevas sanciones, el Gobierno demócrata ha seguido al milímetro cada movimiento del régimen islámico. El pasado abril, cuando Teherán anunció que había logrado enriquecer su uranio al 20%, el Pentágono aseguró que en seis años podrían ser capaces de contar con la bomba atómica.
En una comparecencia en el Senado, responsables de la Agencia de Inteligencia de Defensa precisaron que el primer paso hacia el arma nuclear es enriquecer el uranio al 90%, un umbral para el que los científicos persas necesitarían un año más. A partir de ese punto, según la «experiencia» del Pentágono, restan entre tres y cinco años más para conseguir un artefacto que «pueda provocar una detonación, una explosión que pueda hacer considerar que se trata de un arma nuclear».