Solidaridad critica la gestión del bus urbano y lamenta la amenaza de huelga en Cojetusa

«El cuento de nunca acabar». Así describe el presidente de la federación de asociaciones de vecinos Solidaridad, Sebastián Peña, la situación que afrontan los ciudadanos con el mal estado de las líneas de transporte público y su cuestionado trazado. Y ahora, «lo que faltaba»: una amenaza de huelga.

«Desde Solidaridad estamos hartos de tantas mentiras y tanta huelga debido a la mala gestión de nuestros dirigentes». A través de un comunicado, Peña lamenta que «lo que le hace falta al Mercado de Abastos es otra huelga para acabar con él».

La lista de quejas referentes al servicio es larga: la falta de limpieza, el mal funcionamiento del aire acondicionado o la nueva implantación de líneas con las cuales «no estábamos de acuerdo ya que no se había contado con ninguna organización», según Solidaridad. «En un programa de televisión», cuentan, la delegada de Movilidad, María del Carmen Martínez, «prometió que en el futuro se contaría con nosotros». Entre las iniciativas expuestas por Solidaridad están «que el servicio de autobuses fuera rotatorio» para que todas las líneas pasaran por plaza Estévez, «algo que parece imposible ya que no hay espacio».

Solidaridad cuestiona incluso que exista una empresa interesada en hacerse con la concesión del transporte urbano, tras la voluntad manifiesta de Cojetusa de irse de la ciudad. «La delegada dijo que lo interesante seria que la misma empresa que llegara fuera la que construyera la línea para el tranvía», exponen, pero «aquí no se pone de acuerdo». Solidaridad lamenta que «como siempre» los usuarios son los que al final acaban pagando las consecuencias.