Una pared, una historia, un hombre
Actualizado: GuardarLa pared estaba blanca, blanca inmaculada, grande y solitaria, como desprovista de alma, de historia, de algo que contar...
Esperaba algo o alguien, que le diera vida, que la acompañara al menos unos años más de su larga vida y luego ya se vería...
Cinco murales atrás le preceden, esta vez llegó el mar, el cielo, el azul, las olas que dan vida, olas del mar de Cádiz, ahora se siente bella, vuelve a estar acompañada, vuelve su artista, la impregna de luz, de rostros de arte.
Le habló y la pintó.
La pared le respondió y las olas rompieron su silencio y la pared se abrazó al inmenso cielo que la cubría.
Al artista que le dio mar y cielo, Antoni Gabarre.