El hombre de 71 años acusado de acoso a menores se suicida de un tiro en la cabeza
Su hermana encontró el cuerpo y avisó a la Policía que continúa con la investigación para descartar su relación con otros casos
SAN FERNANDO. Actualizado: GuardarNo aguantó la presión. Un día después de salir en libertad con cargo tras ser denunciado por supuestos abusos a menores, C.G.C. de 71 años se quitó la vida. Lo hizo en su casa de la calle San Antonio y San José, situada en la zona del puente de la Casería de San Fernando. No le tembló el pulso a pesar de que se disparó en la vivienda que compartía junto a su hermana y su cuñado, quienes encontraron su cádaver.
Según confirmó Subdelegación de Gobierno, sobré la una de la tarde del pasado jueves, C.G.C se disparó en la cabeza con una escopeta, y dio un nuevo giro a un caso que ya ha pasado a ser el tema de conversación en la calle.
El pasado lunes, los agentes localizaban a este hombre y lo detenían como responsable de un presunto delito de acoso a cuatro menores de edad. El detenido era puesto en libertad con cargos por el Juzgado de Instrucción número tres de San Fernando.
Según fuentes cercanas al caso, las niñas de entre 13 y 17 años relataron cómo el anciano les ofrecía tabaco y bebidas alcohólicas de forma gratuita hasta que cogió confianza con las menores. C.G.C compartió veladas durante cinco días como si fuera uno más del grupo de jóvenes para después, supuestamente, realizar tocamientos e insinuaciones a las niñas. En ese momento, las menores denunciaron a sus padres los hechos, que pusieron el caso en manos de la Policía Nacional que ha confirmado que, por el momento, no se han interpuesto más denuncias, algo que se esperaba pues en sus testificaciones las menores aseguraron que había más víctimas.
Aún así, la investigación del suceso sigue abierta y la Brigada de Policía Judicial está revisando otros posibles hechos similares para descartar la implicación del fallecido. Por otra parte, el proceso judicial deberá también seguir su curso y tomar testimonios a las menores de lo acontecido para verificar y comprobar que no hay contradicciones en sus explicaciones, una vez que la Policía finalizó de recopilar todos los datos sobre el suceso.
Donde no hay dudas es en el fallecimiento de C.G.C. que aprovechó el quedarse solo en su domicilio para ejecutar la acción. Sin la cerradura forzada y con el arma a su lado, no existen indicios para manejar otras hipótesis. Por ello, todos los esfuerzos de la investigación se centran ahora en esclarecer lo ocurrido en los encuentros que mantenía el mayor con las menores y que se producían en uno de los bancos del paseo marítimo del recinto ferial de la Magdalena.
De todos modos será la Justicia la encargada de cerrar el triste acontecimiento y determinar si hubo o no abuso deshonesto por parte del fallecido a las cuatro jóvenes. Por el momento, la única decisión que tomó el Juzgado de Instrucción número tres de San Fernando fue la de poner en libertad con cargo al acusado tras prestar su declaración y permanecer retenido en los calabozos de la nueva Comisaría.
Una libertad de la que no disfrutó mucho tiempo al decidir quitarse la vida apuntándose con una escopeta en la cabeza.