ESPAÑA

Rubalcaba desvela su estrategia: «Detener, detener y detener»

El ministro del Interior descarta que la ausencia de atentados en un año se deba a que ETA quiera parar

MADRID. Actualizado: Guardar
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Alfredo Pérez Rubalcaba quiso aprovechar la detención de Agirresarobe para lanzar un mensaje tanto a ETA como a aquellos que aún temen que el Gobierno tenga alguna tentación de buscar su fin por la vía de la negociación: que sepan que existe una «estrategia compartida» entre todas las policías para «detener, detener y detener hasta que esto acabe».

La advertencia llega al hilo de las reticencias con las que la Asociación de Víctimas del Terrorismo y algunos sectores del PP -que no su líder, Mariano Rajoy- han recibido los acercamientos de presos etarras a las cárceles del País Vasco. Unos traslados que, según el Ejecutivo, responden a la máxima del 'divide y vencerás'; premia a los arrepentidos y castiga a los recalcitrantes.

Lo cierto es que el Gobierno ha detectado suficientes movimientos en ETA y su entorno político como para atreverse a afirmar que la organización criminal está en su fase final. Lo dijo José Luis Rodríguez Zapatero el pasado viernes y ayer lo reiteró también el consejero de Interior del País Vasco, el socialista Rodolfo Ares, quien pidió a los ciudadanos vascos «un último esfuerzo» para acabar con ETA durante la rueda de prensa que sirvió para informar de la última actuación de la Ertzaintza.

Ares se congratuló de que el último año ha sido malo para la organización criminal, pero «un buen año para la libertad». Casi sesenta miembros de la banda han sido detenidos en España o en el extranjero y a eso hay que añadir que dentro de unos días se cumplirá un año sin atentados «ni graves ni menos graves», subrayó el ministro del Interior.

Aún así, Rubalcaba descartó tácitamente que la ausencia de malas noticias se deba al interés de la banda en declarar un alto el fuego o en demostrar su disposición al diálogo. De hecho, remarcó que si no ha actuado en todo este tiempo no ha sido porque no quiera, sino porque «no puede».