TE REPITES MÁS QUE...
Actualizado: GuardarLo escuché a la hora de comer, me pongo un café y vuelve a sonar y, obviamente, a la hora de acostarme me lo tuve que poner en la radio porque me hacía raro no escucharlo. Dentro de nada se va a poder decir eso de que te repites más que el himno de España. Si tuviera letra ya me lo hubiera aprendido, y ese «chunda chunda tachunda chunda chunda» va a ser un 'hit' (un temazo, vamos) del verano. Ríase de las barbacoas de Giorgi Damn.
Lo de España y el deporte es justicia divina. A las puertas del todo, inmersos en la nada. Ya saben eso de que el segundo es el primero que pierde, pues ese casi siempre era español. Nos volvimos loco (yo no, que no tengo edad como para haberlo vivido) con las pedaladas de Martín Bahamontes y las de Perico Delgado (estas últimas sí las disfruté). Celebramos como auténticos fanáticos cada 'swing' de Seve Ballesteros y nos hicimos aficionados al esquí sólo por ver a Fernández Ochoa.
Pero el himno, nuestro «chunda chunda» particular, sonaba menos que Valerón afónico. El vinilo estaba impoluto, y menos mal que apareció el compact disc.
Y es que los que hemos nacido casi en los 80 tenemos el privilegio de disfrutar en plenitud de facultades, algunos más que otros, los éxitos de toda una nación, por muchos caracteres diferentes y arraigos culturales. Cada uno de su padre y de su madre, pero anda que no salieron a la calle cuando Iniesta metió la pelotita.
Disfrutamos de Nadal, con Wimbledon y Roland Garros, así como la Davis. Hicimos lo propio con la 'Roja', entre Eurocopa y Mundial. Ayer, sin ir más lejos, tuvimos a Alonso y Contador, sin obviar a la 'rojita' en el Europeo. Ahora se acerca el continental de atletismo y de natación. Aviso al que pone el himno que no se duerma mucho. ¡Ay, si lo hubiera patentado en su momento!