Las cementeras temen cierres de plantas por el ajuste en Fomento
Actualizado: GuardarLa patronal cementera (Oficemen) reveló ayer que, tras el recorte de obra pública (6.400 millones) decretado en el Ministerio de Fomento, el futuro del sector es más que sombrío. El presidente de la organización, Joaquín Estrada, confesó que «las perspectivas no son halagüeñas», e insinuó cierres de plantas y ajustes de empleo si la situación no mejora. Algo que parece complicado, pues la falta de pedidos ha hecho que las plantas cementeras trabajen apenas al 50% de su capacidad. «Haremos lo posible para no cerrar», añadió.
El consumo de este material ha caído un 15,92% interanual en el primer semestre, mientras la producción ha descendido un 14,5%. Sólo la exportación, que apenas da dinero, mantiene un cierto pulso que, reconoció Estrada, también acabará. El problema es que, tras la crisis del ladrillo, la obra pública había sostenido a las cementeras, que temen ahora un derrumbe mucho más profundo de su actividad. Si la situación no da un giro de 180 grados, «nos iremos a los consumos más bajos de los últimos 40 años», sentenció Estrada, quien recordó que ese ratio ha caído ya un 60% desde 2007, cuando el 'boom' inmobiliario estaba en su cenit.