¡CENTRO PEATONAL YA!

El trayecto, en línea recta, más largo que puede hacerse en el casco antiguo es de 1.800 metros. Una invitación al paseo. La invasión diaria de vehículos con dos o cuatro ruedas supone un violento freno a esa desatendida pero antiquísima forma de transporte, vinculada estrechamente al turismo y al comercio. Basta echar un ojo a los que llegan para entender que quieren pasear porque la ciudad, que si tiene una virtud, es la de ser paseable. Ese propósito puede y debe convertirse en fuente de ingresos pero tiene en el tráfico un obstáculo que nadie quiere derribar, ni vecinos acomodados, ni empresarios melindres, ni taxistas ni transportistas, obviamente. Los comerciantes no se atreven, pero ha llegado el momento de reclamar muchas más calles absolutamente cerradas al motor. Además de exigir que las ya peatonales lo sean de veras. Eso sólo se consigue con algo parecido a la Policía. Cádiz-Cádiz tiene que ser paseable, sólo así tendrá sentido que el Ayuntamiento llene su perímetro de subterráneos. Para dejar ahí el coche y pasear sin sortear neumáticos, camiones y furgonetas. Ojalá surgiera una plataforma 'Cádiz peatonal ya'. Puede que sus objetivos coincidieran con los de otras que ya existen.