A Rajoy le aburre el presidente
El Gobierno atribuye al «mal perder» del líder del PP su ausencia en la última jornada del Debate sobre el estado de la Nación
MADRID. Actualizado: GuardarMariano Rajoy plantó ayer a José Luis Rodríguez Zapatero y a los portavoces del Grupo Mixto y del PSOE. El líder del PP optó por atender diversos asuntos en su despacho de la sede del partido en la calle Génova de Madrid y se perdió la segunda jornada del Debate del estado de la Nación. Una ausencia que el Gobierno rápidamente ha atribuido a su «mal perder». Los socialistas están convencidos de que su jefe de filas venció al líder del PP en el cara a cara del miércoles.
Los populares, con una visión diametralmente opuesta, defienden que su presidente cumplió con creces en el primer envite. Entienden, por el contrario, que «alguien debe estar muy desesperado si quiere armar lío con este hecho», indicaron fuentes de la dirección nacional.
Rajoy acudió el miércoles al Congreso con el objetivo de prologar su petición de adelanto electoral con una serie de argumentos encaminados a demostrar que José Luis Rodríguez Zapatero capitanea un proyecto agotado incapaz de generar confianza y sin un plan global para sacar a España de la crisis. Al jefe de la oposición, por momentos, se le notó que se aburría con la disertación del presidente del Gobierno. Es más, en la batalla de réplicas y dúplicas, Rajoy llegó a adelantarse en varias ocasiones a los reproches de Zapatero. Los dos se conocen a la perfección después de seis años de duelos parlamentarios, pero, además, el dirigente socialista, según el PP, se ha vuelto «previsible» en sus ataques.
Un argumento que apuntaló Soraya Sáenz de Santamaría, que acusó a Rodríguez Zapatero de haber ido al debate «a pasar dos días» y a esperar que escampe. La portavoz del grupo parlamentario popular abundó que «ni en la sesión del miércoles, ni en la del jueves, Zapatero ha trasladado ninguna medida, ninguna iniciativa ni ninguna esperanza a los españoles para sacarnos de la crisis».
Una premisa que, sumada a la «falta de valentía» del presidente del Gobierno por no explicar a los españoles si además del paro y de la congelación de las pensiones y del recorte de los sueldos, «vamos a ver algo más».
Unos argumentos que diversos miembros del Gobierno consideran excusas de mal pagador. «Es de muy mal perder eso de no presentarse y yo creo que ni sus propios diputados lo aceptan», acotó Carme Chacón, al término del debate. La ministra de Defensa calificó esta inasistencia como un ejemplo claro de comportamiento del PP en general y de su líder, en particular. Chacón realizó estas declaraciones en compañía de la titular de Sanidad, Trinidad Jiménez, quien también cargó contra el PP por su «falta de respeto» a la Cámara, a los ciudadanos y a los grupos políticos que estaban interviniendo. Según sus cálculos, sólo había 15 diputados populares en el hemiciclo. Más pragmático se mostró Manuel Chaves. «No hay un líder de la oposición para los momentos que está viviendo España ni mucho menos hay una persona que pueda tener capacidad en la oposición para ser presidente del Gobierno», remachó el vicepresidente tercero.
Si Sáenz de Santamaría vio a Rajoy como ganador, Miguel Ángel Moratinos, calificó la intervención del presidente del Ejecutivo socialista de «extraordinaria» y, sin dudar agregó: «Ha vuelto a ganar con mucha diferencia».