La alcaldesa no garantiza el pago de las nóminas hasta la semana que viene
Sánchez recrimina al PP y a la CGT que quieran «transmitir una mala imagen del gobierno en vez arrimar el hombro»
JEREZ. Actualizado: GuardarPasan los días y el 100% de las nóminas no acaba de aparecer en el extracto bancario de los trabajadores del Ayuntamiento de Jerez. La situación se tensa mientras el sindicato mayoritario del ente municipal (CGT) no deja que las críticas decaigan arropado por otras centrales como el SIP. Y mientras, la alcaldesa de la ciudad, Pilar Sánchez, sólo puede reunirse con el reto de representantes de la plantilla -como hizo ayer con CC OO, UGT y CTP- para informarles de las gestiones que se están haciendo para normalizar la situación.
En la nueva cita de la regidora con estos tres sindicatos apenas hubo novedades, ya que como la propia Sánchez recalcó después a los medios el ingreso definitivo de las nóminas de junio y de la paga extra no está garantizado hasta el martes o el miércoles de la próxima semana. Así, la primera edil insistió en que todas las gestiones que se están haciendo darán su fruto, y recordó que más de 700 empleados ya han recibido el total de sus emolumentos y sólo están pendientes los sueldos más altos.
La intención de la alcaldesa era transmitir a CC OO, UGT y CTP que «se están haciendo todas las gestiones», así como recibir sugerencias de estos representantes de los trabajadores. Sin ir más lejos, un tema que se puso ayer sobre la mesa fue la necesidad de retrasar el pago de las productividades que cobran algunos empleados, en particular cuando estén en peligro el resto de las nóminas. Eso sí, sobre la posibilidad también planteada de que se elimine definitivamente este concepto sólo adelantó que la cuestión está supeditada a la elaboración de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT), un documento que aventura que estará listo en septiembre.
En el marco de este encuentro semanal de control al que se ha comprometido con los sindicatos, la regidora quiso ponerles al día de donde se están haciendo los esfuerzos económicos del Consistorio, detallando los pagos realizados en lo que va de año. En este punto, Sánchez no dudó en afirmar que todos los desembolsos tienen que ver con «la deuda histórica acumulada a lo largo de 30 años de despropósito y de una mala gestión de la política de personal».
Así, puso como ejemplo el abono hasta la fecha de 4,9 millones de euros correspondientes a los 10 que hay que pagar este año a la Seguridad Social para solventar la deuda existente. También se han pagado 2,4 millones de euros a Hacienda de los seis millones de euros que deben abonarse en 2010. En esta relación incluyó el desembolso de 34 millones de euros en operaciones de tesorería concerniente a la renovación de créditos antiguos no firmados por el gobierno actual. Asimismo destacó el pago a concesionarias y las ayudas sociales que sí se han podido ejecutar.
No hubo más novedades en su discurso, que volvió a referirse a la «perversa herencia» que recibió su gobierno, «cuyos diabólicos efectos no desaparecen en uno, dos o tres años». Eso también le dio pie a criticar «la actitud irresponsable y la falta de colaboración» del PP y de la CGT. A ambos les reprochó que «dañen la imagen de la ciudad en vez de arrimar el hombro» y que crean que «cuanto peor vayan las cosas, cuanto más escándalo haya, mejor les irá a ellos».
De esta forma, Sánchez insistió en que su ejecutivo trabaja para encontrar soluciones viables para la economía municipal «frente a quienes pretenden hacer ver lo contrario escenificando un caos que no existe y acosando a este gobierno». Y fue más allá reprochando al PP que haya sacado ya «la calculadora electoral», así como su «extraña alianza con los herederos sociológicos de quiénes perdieron el poder y quieren recuperarlo a toda costa».
Eso sí, ella también lanzó mensajes políticos a la ciudadanía, de la que dijo que «va a saber valorar lo que hacemos unos y otros».
Y pese a todo, recordó a la CGT que tiene una nueva cita, otra oportunidad de sentarse a buscar soluciones «en vez de irrumpir en el Ayuntamiento alterando el trabajo y la seguridad de la plantilla».