
El nuevo jefe de la Comandancia pide a sus subordinados dedicación plena
El coronel Antonio Tocón no pudo evitar incluir en su discurso una referencia a la victoria de 'La Roja', muy comentada entre los invitados
CÁDIZ. Actualizado: GuardarAustero y muy castrense el acto de toma de posesión del nuevo jefe de la Comandancia de Cádiz, celebrado ayer en el patio del acuartelamiento de la capital. El coronel Antonio Tocón Díez pidió «dedicación plena» a los agentes que ahora pasan a estar bajo su mando; cerca de 1.500 guardias civiles a los que instó a no acomodarse. «El prestigio hay que cultivarlo cada día; por eso se os exigirá preparación y se os demandará disposición para ir más allá del estricto cumplimiento del deber». Ese discurso, con cierto tono de arenga en determinados momentos, coincide con un periodo de recortes severos en el gasto público del que no se escapa el Instituto Armado, cuyos miembros ya ven recortadas sus nóminas.
La ciudadanía y el servicio que debe ofrecerle el Cuerpo Benemérito fue el otro eje de su discurso. Después reconocería al término del acto protocolario y durante un breve encuentro con la prensa, que uno de sus principales objetivos es aumentar la sensación de «seguridad subjetiva, acercando el ciudadano» al Instituto Armado; un deseo que ya expresó nada más aterrizar en el acuartelamiento de la capital. De su nuevo destino se refirió como «una comandancia pionera» en determinadas áreas como la lucha contra el narcotráfico e insistió que no piensa imprimirle una forma diferente de mando, «sino una línea continuista». Para el ciudadano, el coronel Tocón pidió «un trato extremadamente correcto» y volvió a exhortar a sus subordinados a «que las vejaciones, las malas palabras o los malos modos» nunca sean usados por aquellos «que visten el uniforme de este honroso Cuerpo».
La alocución del nuevo jefe de la Comandancia no se extendió en exceso y dejó paso a la intervención de su superior en Andalucía y del delegado del Gobierno, Juan José López Garzón. Éste último, sin dar cifras concretas, aseguró que la Guardia Civil de Cádiz cerró el año pasado con menos delitos y menos faltas denunciadas, pero «con más casos resueltos y una mayor eficacia policial». López Garzón no se olvidó «del Cuerpo hermano» y le indicó al coronel, que ayer asumía el mando de manera oficial, que debe seguir «intensificando la coordinación con la Policía Nacional». Una colaboración que en el caso de la provincia gaditana ha sido esencial para el esclarecimiento de casos de suma relevancia.
No fueron las únicas autoridades presentes. El comisario provincial, José María Deira; el presidente de la Diputación, Francisco González Cabaña o la fiscal jefe, Ángeles Ayuso, también acudieron a una cita que fue criticada por una de las asociaciones profesionales del Instituto Armado (la AUGC), que lo consideró un derroche en tiempos de recortes.
La anécdota
El sentido militar del acto no fue impedimento para que el recuerdo de lo vivido la noche antes se colara también en las palabras del jefe de la Comandancia. No pudo resistirse a mencionar en su discurso la victoria de la selección española de fútbol en el Mundial. El coronel Tocón reconocería después a la prensa que fue un acto espontáneo el que le llevó a retocar su discurso con el pitido final del partido; desoyendo incluso el consejo de su colaboradora más próxima, su propia esposa, quien no lo veía del todo apropiado para la ocasión. Pero 'La Roja' estaba ayer presente en todos los rincones del país. Sólo había que pegar la oreja en los corrillos que se formaron entorno a un café tras concluir el acto protocolario.