Un socavón pone en peligro a los conductores seis meses después del temporal de lluvia

Seis meses han pasado desde que la lluvia provocara daños importantes en la provincia y todo sigue igual en algunas zonas. Un gran socavón continúa poniendo en peligro la circulación por el kilómetro 12,9 de la carretera de Espera, la A-393. Para reparar la misma, la Junta acordó incluirla en un procedimiento de arreglos por urgencia pero, a día de hoy, el peligro sigue estando presente.

El alcalde de Espera, Pedro Romero (IU), no oculta que existe preocupación por la situación general de una carretera «tercermundista» que cada día acoge a más de un millar de vehículos. Además, el tramo del socavón se encuentra «muy mal iluminado», reconoce el regidor, por lo que temen que se pueda producir un accidente importante en la zona, sobre todo cuando cae la noche y resulta más complicado visualizar la pobre señalización. Cuatro pequeñas varillas de hierro y un par de señales no luminosas alertan de este peligro.

Cuando se produjo el socavón, Obras Públicas se puso rápidamente manos a la obra, ya que esta es una vía de titularidad autonómica, reconocen desde el Ayuntamiento. No obstante, aunque se reconoció la urgencia de la actuación se decidió incluirla en la iniciativa que se diseñaba para elevar tres puntos de esta vía que habitualmente se ven afectados por las lluvia. El proyecto ya está redactado, pero no se ha hecho nada. La actuación inicial contaba con un presupuesto de 2,4 millones de euros y con la ampliación de la misma, para arreglar el socavón, se tendrán que invertir 2,8 millones.