Postales de un país en desarrollo

A finales del siglo XIX muchos fotógrafos extranjeros visitaron las ciudades y pueblos más recónditos de Andalucía con la misión de captar el embrujo, el encanto y el exotismo del sur español. Estas instantáneas sirvieron para seducir a la alta burguesía de los países industrializados, que buscaba destinos pintorescos para sus viajes. Pronto estas imágenes se convirtieron en postales que usaban los monumentos, los paisajes y el folklore andaluz como reclamo turístico. La obra social de 'La Caixa' ha recopilado una serie de fotografías de principios del XX en la exposición itinerante 'Andalucía Imaginada', un repaso por la historia de las tres primeras décadas del siglo pasado a través de la mirada de reporteros foráneos, que miraban con otros ojos la realidad española.

La muestra, que ha recalado en varias ciudades gaditanas, llega ahora a El Puerto, donde permanecerá abierta al público hasta el 22 de julio. Las imágenes, que van de 1910 a 1930, llenarán estos días las paredes del centro cultural Alfonso X El Sabio con la idea de acercar a los ciudadanos estampas que reflejan el progreso de una comunidad y su aproximación a la modernidad. Pueden observarse infraestructuras, oficios, fiestas típicas, escenas de la vida cotidiana, costumbres y monumentos tan característicos como la Alhambra de Granada o la Mezquita de Córdoba. El legado de Al Andalus atrajo desde el primer momento a los burgueses europeos, fascinados por el exotismo de la arquitectura de origen árabe.

El periodo que abarca la muestra coincide con el auge de la tarjeta postal, que contribuye a conformar un imaginario andaluz para aquellas personas que no conocían de primera mano el territorio español.

Dividida por provincias, la exposición muestra los hoteles que presidían en los años veinte la playa sanluqueña de Bajo de Guía, el interior de una cueva del Albaicín granadino, las 'cobijadas' de Vejer, trabajadores remendando redes en una playa de Málaga, sevillanos de romería, el interior del Teatro Falla o las procesiones de Semana Santa.

Las fotografías provienen de tres archivos catalanes: el de la Fototipia J. Thomas, el Arxiu Mas y el archivo de Lucien Roisin.