Los grupos políticos tendrán que reducir en un 25% su asignación

Hay que tomar medidas, drásticas o no, para reducir el déficit y plantar cara a una situación económica cada vez más angustiosa. Y en el caso de Jerez, el Ayuntamiento ha decidido que no va a esperar más y, al estilo del Ejecutivo central, esta misma semana aprobará en pleno las medidas extraordinarias para tratar de sanear sus cuentas, que van desde la aplicación del real decreto estatal a otras como el recorte de la asignación a los partidos en hasta un 25%. Y eso a pesar del rechazo frontal de los sindicatos y también del principal partido de la oposición, el PP, que ayer dejó claro que votará en contra del recorte en el Consistorio.

Pese a todo, la Comisión del Pleno de Presidencia dio ayer luz verde a la aplicación del Real Decreto-ley 8/2010 de 20 de mayo, que así se llama la norma por la que se adoptan estas medidas extraordinarias para reducir el déficit público, un decreto que es de aplicación directa y afecta a las entidades locales en diversas materias como gastos de personal, régimen presupuestario y endeudamiento público.

En cuanto entre en vigor esta medida, lo que ocurrirá en la próxima nómina, habrá recortes salariales de entre el 1,5 y el 4,8% según la categoría, amén de una reducción del 5%en productividades y diferentes pluses.

Al respecto de esta norma, el PP votó ayer en contra de la propuesta del PSOE. Según explicó la portavoz municipal de los populares, María José García-Pelayo, la iniciativa -tal y como la presentaron los socialistas en la comisión, «no aporta información, ni transparencia, ni se ha hecho con el consenso de los demás grupos políticos ni los sindicatos».

Para García-Pelayo, el hecho de que lo que se va a aprobar en la sesión plenaria sea la traslación directa del real decreto estatal, cuya aplicación decidirá la Junta de Gobierno Local, les impide dar su visto bueno, ya que en este caso apoyar la propuesta «significaría dar un cheque en blanco al PSOE».

Por contra, el PP sí votó ayer a favor de la propuesta para reducir en un 25% la aportación de ayuda que reciben los distintos grupos políticos con representación municipal. De hecho, la medida recibió el dictamen favorable con la única abstención de IU.