LA VOZ regala mañana '21 gramos', el peso del tránsito a la muerte
La cinta está dirigida por el realizador González Iñárritu, con Sean Penn, Benicio del Toro y Naomi Watts
Actualizado: GuardarSaltarse las reglas de la estructura clásica de un guión cinematográfico y hacer que pequeñas historias cotidianas, tan banales o insignificantes, se entremezclen entre sí y converjan para constituir un relato sólido y bello no es tarea fácil. Los ejemplos de ese tipo de cine en el que las voces individuales se superponen unas a otras para formar una melodía coral, en la que las vidas de muchos personajes toman una misma dirección a partir de un instante, de un accidente, de un hecho puntual, son escasos.
Un accidente de tráfico de resultados terribles marca el inicio de otra de esas películas corales digna de aparecer con letras de oro: '21 gramos' (2003), dirigida por el mexicano Alejandro González Iñárritu. Aquí son el tiempo y la muerte el hilo con el que se tejen las vidas de tres parejas en un microcosmos urbano de los Estados Unidos, aunque en principio fuera pensada para ser rodada en la Ciudad de México.
Es ésta una película cuyo argumento es difícil de explicar, llena de recovecos, rincones, laberintos y saltos del tiempo. Forman el triángulo un profesor universitario que espera un trasplante de corazón (Sean Penn), una drogadicta rehabilitada (Naomi Watts) que lleva una vida placentera junto a su marido y sus dos hijas, y un ex convicto (Benicio del Toro) reconvertido en creyente fervoroso que lucha por sacar adelante a su familia.