Suiza confía en recuperar a su capitán

Suiza agotará todas las posibilidades para recuperar a sus capitán de cara a su estreno en el Mundial contra España. Es su mejor hombre y no van escatimar esfuerzos, aunque está complicado. Su seleccionador, Ottmar Hitzfeld, aún no ha perdido la esperanza de poder contar con él para medirse a los de Vicente del Bosque, pese a que el fisioterapeuta, Claudio Gasser, calcula que necesita al menos diez días para estar a punto.

El equipo médico desplazado a la concentración trabaja a marchas forzadas. Durante tres días le han prescrito un tratamiento contra el dolor y la hinchazón y le han aplicado un drenaje en la zona lesionada. En caso de que no fuera posible, el técnico maneja varias alternativas, pero la más probable es utilizar a Eren Derdiyok, que ayer se declaró «dispuesto» si el seleccionador lo estima conveniente.

Llegó al Mundial como tercera opción, detrás de Frei y de Nkufo, pero podría terminar jugando contra España. «Tengo que trabajar al máximo y confiar en mis posibilidades», declaró el jugador del Basilea. «En este Mundial, mi objetivo será conseguir un puesto de titular», añadió.

El capitán de la selección de Suiza se lesionó en el tobillo derecho durante el entrenamiento de su equipo el miércoles pasado y fue trasladado en ambulancia a una clínica para someterse a pruebas. Se dañó cuando intentaba arrebatar el balón a Steve Von Bergen. Estuvo cinco minutos tirado en el césped, antes de retirarse con problemas a los vestuarios. Desde entonces todos son cuidados para él, porque su peso en el combinado es grande y una selección así no se puede permitir perder piezas clave.