«¡Papá, bueyes!»
Actualizado: GuardarEn 1879, el naturalista Marcelino Sanz de Sautoula exploraba la cueva con su hija cuando ésta se quedó mirando el techo y exclamó: «¡Papá, bueyes!». Acababa de descubrir la joya del arte paleolítico.
En 1879, el naturalista Marcelino Sanz de Sautoula exploraba la cueva con su hija cuando ésta se quedó mirando el techo y exclamó: «¡Papá, bueyes!». Acababa de descubrir la joya del arte paleolítico.