El personal de Iberocruceros atiende a los pasajeros en la nueva terminal antes de subir al barco. :: MIGUEL GÓMEZ
TURISMOTURISMO

El puerto estrena la terminal de cruceros con el embarque de 152 pasajeros

El buque 'Grand Voyager', de la compañía Iberocruceros, utiliza por primera vez el muelle gaditano como base de operaciones

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Son las diez menos cuarto de la mañana y el muelle funciona a pleno rendimiento. Los cruceristas, deseosos de emprender sus vacaciones, se agolpan a las puertas de la nueva terminal de cruceros para dejar sus maletas y el personal del puerto trabaja sin descanso subsanando los habituales problemas del estreno. Roberto intenta restablecer la conexión del ordenador y la Policía Portuaria supervisa el escáner recién instalado para que nada falle en el momento más importante. Mientras tanto, las colas en los mostradores cada vez son más numerosas, aunque los clientes, con sus zumos de bienvenida en la mano, esperan con paciencia, sin apenas inmutarse de los retrasos. Todo está preparado para el día de los estrenos: el de la terminal de pasajeros y el de Cádiz como puerto base de Iberocruceros.

La compañía escribió ayer una de las páginas más importantes de la historia de la administración portuaria, convirtiendo a la capital gaditana en su puerto base para los 152 pasajeros que emprendieron su travesía a bordo del buque 'Grand Voyager'. En siste días recorrerán Vigo, Funchal (Madeira), Santa Cruz de Tenerife, Arrecife y Casablanca, para volver a Cádiz el próximo lunes, donde subirán más de 160 personas. A partir de entonces y hasta el próximo mes de septiembre, Iberocruceros repetirá este viaje por el Atlántico dando a Cádiz relevancia en el itinerario. Después, será la compañía MSC la que tome el relevo ofertando el muelle gaditano como punto de partida y término de sus viajes.

La llegada a Cádiz del 'Gran Voyager' coincidió ayer también con la apertura de la terminal de pasajeros instalada en la antigua Estación Marítima. La puesta en marcha de este importante equipamiento sufrió los habituales problemas del estreno, con algunos fallos técnicos que obligaron a retrasar hasta una hora la apertura de los mostradores. No obstante, el personal de la naviera aceleró todos los trámites para realizar el embarque en tiempo récord y que el buque saliera a la hora prevista, la una de la tarde.

Además, las tres horas que el buque permaneció en el puerto impidió llevar a cabo el proceso de embarque oficial. De esta manera, las maletas tuvieron que recogerse a las puertas de la terminal y ser trasladadas directamente al interior del muelle. Posteriormente, los pasajeros se dirigieron a los mostradores para validar la documentación y después pasar por el arco de seguridad y subir al 'Gran Voyager'. A partir del próximo lunes, que la compañía estará seis horas en el recinto, el procedimiento sufrirá pequeños cambios para que las maletas pasen directamente por su escáner correspondiente. Desde la consignataria Baleares también se hará hincapié en que el pasaje puede embarcar con tan sólo dos horas de antelación, ya que ayer todas las personas que se subieron al buque llegaron cuatro horas antes, formándose colas en la terminal.

Pasaje gaditano

Este retraso no influyó en el ánimo del pasaje, que con paciencia aguantó más de una hora de pie, ya que en las instalaciones apenas ha dado tiempo a instalar una veintena de asientos. La mayoría de los pasajeros destacó la comodidad de poder embarcar en la capital gaditana y no en otros puertos, como Valencia. «De esta manera evitamos las molestias de tener que tomar un avión o cualquier otro medio de transporte para poder llegar a nuestro destino», apuntó Roberto Bautista, un chiclanero que se estrena como turista de crucero sólo porque el barco sale desde Cádiz.

Además del grupo de Roberto Bautista, muchos de los pasajeros procedían de la provincia y otras provincias cercanas como Sevilla o Huelva, por lo que no hicieron noche en la capital, sino que llegaron a primera hora de la mañana desde sus respectivas localidades. La agencia Viajes Rico ha sido la encargada de vender gran parte de los billetes, que tienen precios que oscilan entre 750 euros (con bebidas incluidas) y los 1.165 aproximadamente. Los cruceristas tienen la posibilidad de disfrutar de un Todo Incluido, excepto las bebidas, que se contratan aparte por 16 euros por día y por persona.

Segunda fase de la terminal

El buque 'Grand Voyager' es uno de los más pequeños de la compañía Iberocruceros, con capacidad para 836 pasajeros y 360 tripulantes, y equivaldría a un hotel de cuatro estrellas.

Aunque la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz prefirió no realizar el acto oficial de inauguración de las instalaciones durante la jornada de ayer, su presidente, Rafael Barra, si estuvo presente en el recinto para supervisar su puesta en marcha. Barra apuntó que la inauguración oficial será durante la segunda quincena del mes de junio, con la celebración de una conferencia sobre los puertos. Con respecto a la segunda fase de las obras de la terminal de pasajeros, en la que se ampliará la sala de espera, se duplicará el control de salida y se dispondrá espacio para otros servicios, Barra explicó que ésta tendrá que esperar al traslado de las oficinas de Trasmediterránea y TPC y los despachos de transportistas terrestres.

En este sentido, puntualizó que Trasmediterránea y TPC tienen previsto trasladarse en unos meses a la nueva terminal Ro-Ro del Marqués de Comillas, mientras que los transportistas se reubicarán en otro espacio. Rafael Barra aseguró: «Las obras tendrán que comenzar o a principios de 2011 o de 2012, ya que entre mayo y noviembre no podemos hacer nada porque es la temporada de cruceros».

El presidente de la Autoridad Portuaria también aseguró que la escasa capacidad de la actual terminal, impedirá realizar el próximo lunes el desembarque y embarque del 'Grand Voyager' al mismo tiempo. en su lugar, las personas que suban al buque lo tendrán que hacer por el lateral del edificio, una vez pasados los controles correspondientes.

Comercios

Además del 'Grand Voyager', el muelle volvió a recibir durante la jornada de ayer a otros dos cruceros. El 'Silver Cloud' permitió la llegada a la ciudad de 237 cruceristas y más de 238 tripulantes, mientras que otros 1.749 llegaron a bordo del impresionante Celebrity Century. Gracias a estos dos barcos, las calles de la ciudad se convirtieron en un continuo ir y venir de turistas, que coparon la mayoría de las terrazas de la Plaza de la Catedral, Plaza de las Flores y la calle Columela, así como los autobuses turísticos que circulan por la ciudad. Muchos de ellos aprovecharon también su estancia para realizar sus compras en los comercios gaditanos. Sin embargo, la mayoría de los establecimientos decidió cerrar sus puertas al mediodía ante los escasos efectos que a juicio de los comerciantes tiene este tipo de turismo para sus negocios.

Más buques

Durante la jornada de hoy, el puerto tan sólo recibirá la llegada de 'La Belle de Cadix', al que seguirán el próximo miércoles el Ocean Princess, que hará por primera vez escala en la capital gaditana y que permanecerá en el puerto nueve horas, durante las cuales el pasaje podrá visitar la ciudad. El día de máxima afluencia de cruceros será el viernes, cuando atracarán otros tres barcos.