«Un séptimo y un octavo puesto no es lo que se espera de Ferrari»

A Alonso le tocó un papel secundario en el circuito de Estambul. Mientras Sebastian Vettel y Mark Webber discutían en los micrófonos, el asturiano se midió a la talla de un Ferrari que no ha seducido en Turquía. «Sebastián y yo hablaremos como adultos y seguiremos adelante», dijo Webber respecto al incidente con su compañero. «Estaba muy pegado a Webber y lo adelanté por la izquierda, esa es la historia», resumió Vettel, al tiempo que el jefe de ambos, Chris Horner, trataba de poner paz con la diplomacia por bandera: «Webber no se abrió suficiente y Vettel entró demasiado rápido. Hoy hablamos y mañana se ha acabado la historia».

Problemas por doquier mientras en el campamento de McLaren regresaban las camisetas naranjas que se traducen por triunfo. Lewis Hamilton también perdió cuota de pantalla en las ruedas de prensa porque el foco de atención era el altercado entre los toros rojos.

Alonso tenía el gesto torcido aunque trató de insuflar optimismo a sus declaraciones: «Se pueden hacer varias lecturas de la carrera. A pesar de que estamos bastante lejos de Red Bull y McLaren, seguimos ahí, en la pelea. Somos el cuarto coche, pero necesitamos mejorar más para poder pelear de tú a tú».

Insuficiente

Metido en harina, el piloto asturiano dijo lo que pensaba: «Lo más preocupante del fin de semana es que no hemos suficientemente rápidos. Un séptimo puesto para Massa y un octavo para mí no es lo que se espera de la escuderia Ferrari. Las evoluciones que vamos a tener más adelante no nos van a dar para alcanzar las siete u ocho décimas que necesitamos para estar cerca de Red Bull y McLaren».

Cuestionado sobre el presunto bajón del coche, el español aseguró que «la Fórmula 1 es un mundo complejo en el que no interviene una sola variable. Después de Barcelona sabíamos que no teníamos el coche que queríamos todavía. No es normal que estemos séptimo y octavo. Lo aceptamos, pero ya sabemos que tenemos que mejorar».

Puestas las cartas boca arriba, se le preguntó si tenía dudas sobre la capacidad de Ferrari en su fábrica de Maranello para mejorar el bólido: «No -respondió Alonso-. Estoy muy tranquilo. Somos cuatro escuadras grandes muy igualadas, pero tenemos al mejor equipo. No estoy preocupado por esto».

Frente a las disputas que se vivieron en Red Bull, Fernando Alonso estrechó lazos con los suyos: «Esto no se ha acabado, desde luego. Cuanto más unidos estemos, más trabajemos y menos se hable de Felipe y de mí, mejor será para todos».