MUNDO

Don Felipe preside la cena de gala de los jefes de Estado y de Gobierno

MADRID. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El Príncipe de Asturias sustituyó ayer al Rey Juan Carlos en la cena de gala ofrecida en el Palacio Real a los jefes de Estado y de Gobierno que asisten hoy en Madrid a la cumbre Unión Europea-América Latina y Caribe.

Don Felipe reemplazó a don Juan Carlos, que se restablece en Barcelona de la operación quirúrgica del pasado día 8, en la que los cirujanos extirparon un nódulo en su pulmón derecho. El lugar de honor en el banquete que abrió la cumbre correspondió a los Príncipes de Asturias que suplieron la ausencia de los Reyes. El Príncipe de Asturias fue el encargado del brindis ante los jefes de Estado, de Gobierno y delegaciones de casi cincuenta países. El relevo, según explicaron fuentes gubernamentales, no exigió que se invocara ningún precepto constitucional porque la Casa Real decide qué miembros la representan en los actos protocolarios que presiden. No es la primera vez, recuerdan, que el Príncipe reemplaza al Rey en asuntos de este tipo. Don Felipe, por ejemplo, representa siempre a España en las tomas de posesión de los gobernantes latinoamericanos.

La cena de gala no fue el único acto en el que el hijo del Rey sustituyó a su progenitor. Compartió con el presidente mexicano, Felipe Calderón, la inauguración del primero foro España-México que se celebró en el Instituto Cervantes. En ese acto, dio todo el apoyo de España al país latinoamericano en su «difícil lucha» contra el narcotráfico y el crimen organizado. Un gesto que Calderón agradeció y se comprometió a «resolver» porque son «problemas serios» que enfrenta «con responsabilidad». El Príncipe subrayó que ambos países son «motores clave» para las relaciones entre la UE y América Latina, y tendrán una buena prueba para ejercer ese papel en la cumbre sobre el cambio climático que se celebrará en la localidad maya de Cancún.

Don Felipe tendrá otra oportunidad de volver a reemplazar a su padre en breve, será en la final de la Copa del Rey que se jugará mañana en el Nou Camp de Barcelona entre el Atlético de Madrid, equipo del que es seguidor, y el Sevilla.