No fue necesario ceder las funciones al Príncipe
MADRID Actualizado: GuardarEl corto espacio de tiempo que estaba previsto que el Rey permaneciese sedado en el quirófano y la no excesiva gravedad de la intervención quirúrgica hicieron que tanto la Casa Real como el Gobierno entendiesen que no era preciso que el Príncipe Felipe asumiese de forma provisional la regencia de España.
Ésta es una posibilidad recogida en el artículo 59 de la Constitución, que prevé la regencia del Príncipe «si el Rey se inhabilitare para el ejercicio de su autoridad y la imposibilidad fuere reconocida por la Cortes Generales. No obstante, tanto el presidente del Gobierno, como el líder del PP y el presidente del Congreso estuvieron informados en tiempo real, primero de la necesidad de realizar la intervención quirúrgica y después de la evolución médica del monarca.
Según el equipo médico que le atendió, Don Juan Carlos podrá reincorporarse a sus tareas de una forma casi total en unas dos semanas, porque, como dijo el doctor Molins, «es diferente descargar en muelles que subir una hora al despacho, que realizar una actividad no física». Los viajes y la intervención en actos públicos deberán esperar unos días más.
El Rey trató de superar esta operación con la máxima normalidad y la mínima afectación a su agenda. Nada más saber que le tenían que intervenir preguntó a los médicos si podían esperar unos días para poder cumplir con los compromisos, que cerró con la recepción el viernes por la noche al vicepresidente norteamericano, Joe Biden. Ni él ni el Príncipe quisieron tampoco que Don Felipe anulase sus compromisos, que este sábado le llevaron a Costa Rica, para la toma de posesión de Laura Chinchilla.
El jefe del Estado deberá aplazar los actos de su agenda al menos 15 días, pero el resto de miembros de la Familia Real, la Reina, el Príncipe y las infantas, mantienen la semana próxima la mayor parte de sus actividades.