En la cabeza de la manifestación se encontraban los líderes y representantes en Cádiz de la UGT y Comisiones. :: MIGUEL GÓMEZ
Ciudadanos

La manifestación del trabajo sigue igual en el año del paro desbocado

Más de 2.500 personas acudieron a una marcha con escasas dosis de protesta pero con la promesa de una futura huelga general

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Cádiz, esa ciudad que se pone en pie de guerra para proteger hasta la última piedra de sus monumentos. Que no duda en defender a capa y espada su idiosincrasia pero que se muestra más remisa en defender su derecho al trabajo. Sólo así se puede explicar que la manifestación gaditana del Día del Trabajo contara ayer con una asistencia similar a la de años anteriores. Entre 2.500 y 3.000 personas según fuentes municipales y de los dos grandes sindicatos organizadores: Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CC OO). Desde UGT, justificaban la ausencia de público en el año del paro -que en Cádiz supera ya el 30%- en la coincidencia con la Feria de Jerez y la Motorada.

Sin embargo, los dos sindicatos mayoritarios no fueron los únicos presentes. Izquierda Unida -con Sebastián Terrada al frente-, la Unión de Sindicatos de Trabajadores en Andalucía, la Plataforma de Parados de Cádiz, el Partido Andalucista, Izquierda Anticapitalista o la Pastoral Obrera se hicieron ayer visibles con sus pancartas. Carteles que seguían al pasquín que abría la manifestación y que tematizó la marcha: «Por el empleo con derechos y la garantía de nuestras pensiones». «Este primero de mayo tenemos un lema que recoge todas nuestras reivindicaciones más globales», explicó Pedro Custodio, secretario general de UGT en Cádiz, en el discurso posterior a la manifestación.

Más de dos horas tardó la cabeza de la marcha en recorrer la Avenida y la Cuesta de las Calesas para llegar a San Juan de Dios. Un tiempo en el que los manifestantes se hicieron oír aunque sin grandes críticas la Gobierno. Una circunstancia que indignó a algún que otro espectador y que también se cristalizó en las pancartas. Los carteles y banderolas más críticos se encontraban en el grupo de Izquierda Anticapitalista. Más de una treintena de jóvenes que en su marcha pedían a gritos una huelga general y ponían en duda los ideales del presidente del Gobierno -«¿Zapatero socialista? Ja, ja, ja»- o reconvertían canciones - «tengo un contrato basura que es lo que se lleva ahora»-.

Tensión final

Entre la tranquilidad de los sindicatos y las arengas de Izquierda Anticapitalista, la marcha transcurrió con normalidad hasta la plaza de San Juan de Dios. Allí se vivieron los momentos de mayor tensión de la mañana cuando la Plataforma de Parados e Izquierda Anticapitalista increparon a Custodio y a Manuel Ruiz, líder gaditano de CC OO, durante sus respectivos discursos. Entre gritos de «Comisiones amarillo es», «¿Dónde está la huelga general?» o «sindicato vertical»; Custodio y Ruiz realizaron sus mítines en los que tuvieron críticas para la derecha y los bancos y mostraron su apoyo a las asociaciones de Memoria Histórica ante «los ataques del Tribunal Supremo».

Una de las pocas palabras que recibió el apoyo unánime de todos los presentes, divididos entre los que querían escuchar a los líderes de los sindicatos mayoritarios y los que intentaban boicotearlos. Sin embargo las tornas cambiaron cuando Juan Antonio Becerra, portavoz de Parados Gaditanos, subió al escenario para explicar «la difícil situación» por la que están pasando los encerrados en San Lorenzo y el escaso apoyo recibido. El propio Becerra lo explicaba momentos antes de subir: «La posibilidad de participar en la manifestación es sólo un apoyo a medias. No nos han ayudado. Además han querido que nos pusiéramos en la cabeza de la manifestación pero sólo por política, por salir en la foto».