El Ayuntamiento libera 30.000 euros para realizar la auditoría externa
Es el primer paso para la contratación del procedimiento, aunque continúa sin tener fijada la fecha para llevarse a cabo
Actualizado: GuardarHa sido necesario todo un año para que el Ayuntamiento dé un paso en firme y muestre su preocupación por contratar una auditoría que analice tanto las cuentas municipales como sus organismos autónomos. El pleno de ayer sirvió para que el equipo de Gobierno liberara 30.000 euros destinados a los estudios y trabajos técnicos del Área de Economía y Hacienda vinculados a los procesos de la auditoría. Esto no significa que en un par de semanas una empresa externa realizará un informe del estado económico del Consistorio, tan sólo que se determinará el procedimiento de contratación y la forma más adecuada de estudiar las cuentas. Al menos es un comienzo.
Y es que, tal y como apuntó la Consejería de Gobernación en junio de 2009 al propio Ayuntamiento, existen una serie de condicionantes a la hora de iniciar un proceso auditor por una empresa externa, debido a que la fiscalización interna de la gestión financiera depende de los funcionarios de Intervención y la externa del Tribunal de Cuentas y de la Cámara de Cuentas. Por ello, si se va a realizar una análisis de las cuentas por otra persona o entidad, esta debe llevarse a cabo bajo la responsabilidad de los responsables de Intervención.
Por ello y para evitar impugnaciones o dobles lectura el alcalde, Manuel María de Bernardo, solicitó en junio a la Cámara de Cuentas que ampliara el plazo de sus trabajos y se extendiera a otros ámbitos, petición que aún no ha sido contestada y que parece poco probable ya que el organismo fiscalizador no ha atendido ninguna petición de tal índole hasta el momento.
Con este trámite el bipartito pretendió tumbar la moción socialista que volvía a reivindicar la auditoría y ponía la fecha de un mes. «Dudo de su palabra y compromiso ya que han aprobado la partida dentro de una modificación de crédito de más de 700.000 euros y como asunto urgente. No es más que un intento de lavar la imagen ante los ciudadanos pero lo que se consigue con ello es crear más sospechas», defendió el portavoz socialista, Fernando López Gil.