Endurecimiento penal

La reforma del Código Penal que el Congreso de los Diputados remitió ayer a la Cámara Alta supone un endurecimiento punitivo para crímenes de terrorismo, pederastia y corrupción al tiempo que tipifica nuevos delitos como la piratería y agrava las penas para casos de reincidencia y contravenciones relacionadas con el medio ambiente, urbanismo y soborno. Aunque algunos grupos parlamentarios como el PP consideraron que la mayor severidad que el legislador propone para un amplio abanico delictivo es insuficiente y otros, como el PNV, excesiva, la reforma conecta con las corrientes legislativas en vigor en la Unión Europea. Y, refleja, las demandas de mayor rigor punitivo desde amplios sectores sociales respecto a delitos contra la libertad sexual especialmente de mujeres y de menores. Las reticencias que llevaron al PP a abstenerse en la votación de un proyecto que contiene un buen número de sus enmiendas no debiera ser impedimento para que durante el trámite del Senado se produzca una aproximación de posturas que haga viable el consenso sobre el texto definitivo.