Rafael Lorente. :: j. c. c.
Jerez

«En mi pregón dedico versos a cada día de Feria»

Rafael Lorente Pregonero de la Feria 2010 en La VozEl articulista pronunciará mañana una original exaltación de la fiesta a partir de las 21.00 horas en la caseta de LA VOZ

JEREZ. Actualizado: Guardar
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-¿Cómo será el pregón de mañana?

-No es un pregón al uso, es distinto. Tiene unas connotaciones que no son las habituales. No lo quiero desvelar por completo pero una guitarra me va a acompañar y va a ser un tanto improvisado porque según me sienta haré una cosa u otra. Tiene más de cien cuartetas, son redondillas rimadas en consonante. Dedico una serie de estrofas a cada día. Voy a ensalzar la feria, a pregonarla, a cantarla. No voy a leer un manuscrito monótono y monocorde. Soy un jerezano que quiere mucho a su tierra y entiendo que un pregón es eso: hacer que a la gente le guste, que antes de que empiece comiencen a vivir la Feria.

-¿Qué le supone ser el pregonero de LA VOZ en lo personal?

-Mucho. Yo he dado ya varios pregones pero nunca el de la Feria. He dado el pregón del toreo, el de la saeta, la guitarra o la Navidad pero nunca el de la Feria del Caballo. Supone una responsabilidad y, de hecho, estoy un poco preocupado pero, en fin, soy una persona a la que le gustan los retos. En un primer momento, me entró cierta preocupación pero también alegría. Pensé que era una responsabilidad y que me lo tenía que tomar en serio. Cuando las cosas te llegan, son de verdad y en tu fuero interno está llevarlo a cabo y tienes ilusión, sale. Me ha salido seguido, casi sin pensarlo.

-Imagino que le gusta la Feria.

-Por supuesto, disfruto más de aquellos momentos que tengo en el recuerdo: el paseo de caballos, los últimos días de la Feria que son espectaculares, la iluminación, el día de las mujeres, el martes que voy con amigos... Lo que más me gusta: las juergas flamencas de altas horas de la madrugada, que cada vez se dan menos porque los excesivos decibelios de las casetas colindantes impiden que se pueda escuchar el cante puro de Jerez, con sentimiento.

-¿Cómo es su día perfecto de Feria de Jerez?

-Es aquel que te vas a comer, después tomas una copa y vas a los toros, por lo que te desligas un poco de la Feria. Luego hay que volver, cenar y terminar con una juerga flamenca hasta por la mañana. Es el día perfecto, pero no siempre se da.

-¿Hay alguna caseta que visite sin falta cada año?

-La caseta de LA VOZ es donde paro desde que colaboro con el periódico. Me gusta ir también al Casino jerezano, a Los Cernícalos, a la caseta de Paco Lechuga, la de La Paquera y Los Juncales, que es donde mejor se come buena comida flamenca.

-¿Vino o cerveza?

-Vino, aunque haga calor. Y cuando me canso, rebujito, para refrescar. Como decía Pemán, beber es todo medida.

-¿Qué es lo mejor y lo peor?

-Lo mejor es su recinto. En el pregón hablo de él, es inigualable. Provoca a la feria unas condiciones que no tiene ninguna otra. Lo peor es lo que de unos años para acá está inundándola más la excesiva cantidad de decibelios, una megafonía con la que no se puede hablar. La Feria es un lugar de encuentro y así no se puede charlar porque te acabas quedando afónico. Me gusta mucho la Feria porque la gente se pone guapa, los hombres incluso visten con un punto de presunción. A la Feria hay que ir con arte, con clase y bien vestido.

-¿Qué tiene la de Jerez que no tengan otras y qué tienen otras que no tiene la de Jerez?

-Lo que me ha gustado siempre de la Feria de Jerez es su categoría. Y esa categoría se la da el recinto y el espectáculo de los enganches maravillosos y los caballos enjaezados, los jinetes perfectamente vestidos y las amazonas, que no se suelen ver en otro lado. Me gusta el rigor que hay para que las guarniciones vayan limpias, los cascabeles perfectos... Todas las ferias tienen su encanto y casi todas quieren emular a la de Jerez. También me gusta la de Sanlúcar, que tiene mucho sabor.

-¿Cambiaría algo?

-Le pediría a la alcaldesa que pusiera una calle para las casetas de las peñas flamencas, que allí no hubiera esa megafonía que impide el cante y el baile.

-¿Podría adelantar algo del pregón de mañana?

-«La Feria, señores, es una forma de vivir, de disfrutar y de sentir en el Real de Jerez, de vestir con elegancia, con grabo, con distinción, un punto de presunción para que cobre importancia».