El desembarco de Ikea en Jerez no se ha quedado al margen de las disputas políticas entre el equipo de gobierno y el ex edil andalucista. :: JAVIER FERNÁNDEZ
Jerez

El Ayuntamiento acusa a Pacheco de querer ahuyentar a los inversores

El delegado de Urbanismo critica que el ex alcalde, «desde su jubilación», se dedique a dañar la imagen de Jerez como en el caso de Ikea

JEREZ. Actualizado: Guardar
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La polémica sobre las condiciones en que se gestó el desembarco de la multinacional Ikea en Jerez se ha vuelto a desenterrar después de las últimas declaraciones del ex alcalde, Pedro Pacheco, a este medio en las que calificaba el asunto como «el mayor tocomocho de la historia del PSOE en Andalucía».

El que respondió a esta cuestión ayer fue el delegado de Urbanismo, Juan Pedro Crisol, que lamentó que el ex primer edil «no sepa estar a la altura de las circunstancias», añadiendo que «en vez de disfrutar de su jubilación, siga instalado en la acritud, empeñado en ahuyentar a los inversores, dando una imagen negativa de Jerez, en lugar de estar dedicándose a ayudar a la ciudad». Asimismo añadió que «aunque no lo haga públicamente, porque sería reconocer un fracaso propio, Pacheco sabe de antemano que la inversión sueca es la mejor que ha venido a Jerez en los últimos treinta años, y para ello utiliza un discurso basado en medias verdades, que en el fondo son inciertas».

En este sentido, el delegado de Urbanismo manifiestó ayer que «con la apertura de un centro comercial de estas características el gobierno municipal ha cumplido un doble objetivo: el primero fomentar la llegada de inversores que revitalicen la actividad económica y generen empleo directo e indirecto; y segundo, posicionar la ciudad de Jerez dentro del mapa de ciudades con nuevas oportunidades de negocio para seguir liderando la implementación de la iniciativa empresarial en la provincia y en Andalucía occidental».

Además de estos objetivos, Juan Pedro Crisol advirtió de que desde el Consistorio jerezano se están poniendo en marcha medidas para incentivar la actividad comercial en todo el municipio, comentando que gracias a las nuevas infraestructuras y medios de transportes, Jerez estará mejor conectada que nunca, abriéndose paso ante las nuevas exigencias de un nuevo contexto económico». En este sentido, «el Ayuntamiento seguirá facilitando a inversores y emprendedores cuantas facilidades requieran si tienen como finalidad generar riqueza y crear empleo en la ciudad».

Con todo este argumentario quiso contrarrestar Crisol las afirmaciones realizadas por Pedro Pacheco, que fue rotundo a la hora de referirse a la inversión de Ikea en Jerez y de denunciar que, según sus datos, el proyecto de la multinacional sueca del mueble ha contado con todo tipo de privilegios municipales y le ha costado a las arcas municipales ni más ni menos que 68,6 millones de euros.

Pacheco echaba mano de un informe realizado «por expertos independientes» para detallar las cuentas que justificaban su afirmación de que «la operación supondría unas minusvalías para el erario público municipal de 68,6 millones de euros». Además, recalcaba que en dicha cantidad «no están determinados los importes por bonificaciones fiscales tanto en el IBI como en licencia de obras y apertura», privilegios con los que ha contado Ikea. «Tampoco está determinado el coste que supone la ampliación de la estación eléctrica que tiene que soportar el Ayuntamiento con motivo de esta ampliación de actividad», remataba.