Sociedad

La Real Academia de Ingeniería homenajea en Cádiz al marino Jorge Juan

Fundó el Observatorio Astronómico y participó en la expedición para comprobar la anchura del globo terráqueo en el Ecuador

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Siglo XVIII, centuria de grandes descubrimientos, otros tantos movimientos culturales y cambios sociales y políticos. Años en los que vivieron insignes personajes y se desvelaron varias de las bases que hoy sientan al planeta. Los libros de geografía e historia recogen un acontecimiento que hoy, casi tres siglos después, es un axioma universal: la forma de la Tierra no es completamente esférica. En 1735, un alicantino nacido en Novelda pero durante largas temporadas afincado en Cádiz, fue designado junto a otro español -Ulloa- para participar en un viaje científico a América con el fin de comprobar la mayor anchura del globo terráqueo en el Ecuador. El marino se llamaba Jorge Juan y Santacilia y esa expedición empezó a forjar la figura de uno de los ingenieros más importantes del país.

Ya era el turno pues de ofrecer un homenaje a tan ilustre personalidad, y ha sido su casa, la Real Academia de Ingeniería, la que se lo esta ofreciendo estos días en su otro hogar, Cádiz. La primera sesión de este encuentro académico y acto de reconocimiento a la vida y obra del marino, matemático, geodesta y diplomático alicantino se celebró ayer en el Ayuntamiento, en donde la alcaldesa Teófila Martínez y su homólogo de Novelda, Mariano Beltrá, ejercieron de presidenta y moderador de la mesa que se abrió en honor a Jorge Juan y Santacilia.

La triste actualidad marcó el inicio de la cita. En el recuerdo, el fallecimiento de los cuatro militares españoles fallecidos este fin de semana en Haití. Miembros de la Armada Española que el mismo marino se encargó de modernizar durante el siglo XVIII. Interesado en la ingeniería naval, Jorge Juan se desplazó a Londres para conocer las técnicas constructivas y proyectó y dirigió los arsenales de Cartagena y Ferrol. Recibió el cargo de capitán de la Compañía de Guardiamarinas en 1751, estableciéndose en Cádiz. Aquí fundó el Observatorio Astronómico y la Asamblea Amistosa Literaria, sociedad de discusión sobre temas de física, geografía, etc. «Aquel Cádiz del XVIII inquieto, curioso y cosmopolita, puerta europea de América y África, gozó la oportunidad de tener como vecino a tan ilustre personaje», destacó la alcaldesa.

El acto académico en el que participó el presidente de la Real Academia de Ingeniería, Aníbal R. Figueiras Vidal, el académico Jaime Torroja y el historiador Carlos Martínez Shaw, entre otros, abre el ciclo que continúa hoy en Diputación con la presencia del decano de los Ingenieros Navales y Oceánicos, Manuel Moreu Munaiz.