La Bahía llora la pérdida de cuatro de sus vecinos

La Villa de Rota y San Fernando comenzaron el día con toda su población consternada por la triste noticia. El Ayuntamiento roteño decretó un día de luto oficial y ondeó las banderas a media asta como señal de duelo y gesto de solidaridad con las familias de los militares y con el dolor de toda la Armada. Desde primera hora de la mañana, las inmediaciones de la Base Naval se convirtieron en un ir y venir de medios de comunicación en reclamo de las reacciones de varios militares, que mostraron su pesar por la muerte de sus compañeros. Los roteños recibieron un doble impacto por la circunstancia de que el Comandante del Cuerpo de Intendencia, Luis Fernando Torija, estaba casado con una vecina muy conocida.

En La Isla, el dolor por Francisco Forné se dejó sentir de forma especial en el sector III de Camposoto, zona en la que residía y a la que acudieron multitud de compañeros, amigos y familiares para recordar y compartir el sufrimiento, con un silencio respetuoso y con las lágrimas al borde del llanto. «Ha sido un jarro de agua fría, algo que para nada se esperaba y una pena porque era un gran atleta y, sobre todo, mejor persona».

Conmoción entre los amigos

Un consternado Antonio Martínez, presidente del club de atletismo Unión Atlética de la ciudad, equipo al que pertenecía Forné desde hacía 8 años y en el que desarrollaba su pasión por el atletismo. «Cuando escuchamos la noticia nos inquietamos porque sabíamos que él manejaba uno de los helicópteros del Castilla y albergábamos la esperanza de que no fuera él. La noticia nos ha hundido».

Francisco Forné, teniente de Infantería de Marina, había pertenecido el Tercio de Armada pero finalmente recaló en la escuadrilla de aeronaves de Rota para acabar embarcado en el Castilla. Un destino que le había impedido competir en los diferentes torneos andaluces en los que estaba registrando muy buenas marcas. Ahora, entre sus compañeros impera la incertidumbre al no contar con información detallada sobre la recuperación del cuerpo. «Estamos esperando las noticias y lo más seguro es que vayamos a Rota ya que suponemos que será allí donde se centralice todo. Entre los compañeros estamos destrozados», aseguró Bartolomé Cantillo, uno de los entrenadores del club que conocía bien a Francisco.

El Ayuntamiento de El Puerto, que ha decretado un día de luto oficial para mañana, fue el que tuvo conocimiento de la fatídica noticia de forma más tardía. A última hora de la tarde, confirmaron que Manuel Dormido, alférez de Navío, residía en la zona de Fuentebravía. Casado y con una hija de unos dos años, fue descrito por un amigo como «una persona muy abierta».

«Ha sido un gran impacto que nadie se esperaba. Coincidíamos todas las tardes con él en los columpios, donde íbamos con los niños. Nadie podría decir nada malo de él, era muy simpático y alegre. Su esposa está destrozada».