Cerca de cinco kilómetros de curvas y subida

El trazado de la Subida a Ubrique es uno de los más atractivos del calendario automovilístico a nivel nacional. Y es que sus casi cinco kilómetros de longitud no tienen desperdicio y cualquier punto es del interés de los aficionados al mundo del motor. El tramo parte desde la misma población de Ubrique, para finalizar en el punto kilométrico 16.9 de la carretera A-2302. Los primeros compases discurren sobre una carretera ancha y de impecable piso, con curvas bien peraltadas donde la velocidad de los vehículos llega a ser importante. Desde esta zona, tras pasar por un cruce donde acaba la localidad de Ubrique, se enlaza con la A-2302, carretera algo más estrecha, donde se inicia un tramo de virajes cortos a derecha e izquierda. Sigue por una breve zona algo más rápida y a continuación se mete en la paella, zona más frecuentada por el público. En los últimos metros de subida, el trazado se convierte en una zona mixta con todo tipo de giros y radio de curvas. En este tramo el piso también es liso y firme, cualidades propias de un nuevo asfalto que tiene desde hace cuatro ediciones.