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«Queremos que salga esposado del juzgado como yo salí de mi casa»
Los afectados por la presunta estafa de Credijerez se manifestaron ayer a las puertas de los juzgados de García-Figueras
JEREZ. Actualizado: GuardarTras dos intentos fallidos, ayer por fin prestó declaración en el Juzgado de Instrucción número 3 el hasta ahora único imputado en la ciudad por la presunta estafa de Credijerez, Juan Pedro Vega. El acusado, que no compareció en las dos ocasiones anteriores en las que estuvo citado, sí apareció ayer en el edificio judicial de la avenida Tomás García-Figueras, si bien logró dar esquinazo a los afectados allí congregados.
Mientras Vega, que entró por los garajes del inmueble sin ser visto, ofrecía su versión al juez, una decena de perjudicados se concentraba a las puertas del juzgado y clamaba por que se haga justicia. Uno de ellos, el roteño Rafael Romero, rememoró el duro trance vivido el pasado viernes cuando fue desahuciado de su casa por el perjuicio económico que le ha supuesto la presunta estafa.
«Lo que quiero es que Vega salga de los juzgados como yo -sentenció-, que salí el viernes esposado de mi casa por defender mis derechos. La policía entró y empezó a dar patadas a los muebles para detenerme. Yo estaba con mi hijo y me esposaron, como si fuera un perro. Me han fichado como a un delincuente, cuando soy un pizzero normal y corriente».
Pérdidas cuantiosas
Entre el valor de su vivienda y el dinero que según él nunca le llegó a abonar Credijerez de lo acordado, Romero ha perdido cerca de 500.000 euros. Otras personas han tenido que renunciar también a sus casas, pertenencias y fondos diversos que dudan puedan recuperar algún día. Como se recordará, Credijerez ofrecía un servicio de refinanciación de deudas y su quiebra dejó presuntamente en la estacada a siete familias jerezanas, más otras tantas de San Fernando, Sevilla, Málaga y Bilbao.
Vega, sin embargo, se ratificó ayer en su declaración inicial y no reconoció su participación en hecho delictivo alguno. Así, según relató uno de los abogados de los perjudicados, Roberto Carlos Ortega, el imputado aseguró que todos y cada uno de los afectados habían percibido las cantidades estipuladas, por lo que la supuesta estafa nunca tuvo lugar. Además, reiteró que su labor el tiempo que estuvo al frente de la empresa como administrador se limitó a ejercer de intermediario entre los prestatarios y los clientes.
En la misma línea, el acusado calificó de erróneo el informe ofrecido por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía Nacional, que sí pone el dedo en la llaga y alude a presuntas irregularidades cometidas por Credijerez en sus negociaciones con los perjudicados.
En lo que respecta al procedimiento, la instrucción del caso aún sigue abierta por lo que no se descartan nuevas imputaciones, como sugieren los denunciantes. Mientras dure esta fase, las partes podrán seguir recabando pruebas y aportando testimonios hasta que se produzca la petición oficial de condena, que se llevará a cabo una vez que finalice la instrucción.