Esta semana, por fin la reestructuración

Lo mismo podría decirse de la tan anunciada y retrasada reestructuración de las consejerías tras la remodelación del Gobierno de Griñán. Se conocerá este martes por fin, tres semanas después de los cambios en el Gobierno y justo el mismo día en que se reúnen los partidos para hablar de la crisis. La reducción de cargos en medio de una legislatura obedece igualmente al intento de mejorar la imagen de los políticos ante una sociedad asustada por la magnitud del paro. Unos cuantos directores generales menos no conllevará un ahorro significativo en los Presupuestos multimillonarios de la Junta.

Como apuntaba Mar Moreno esta semana en el Parlamento, es un debate peligroso. De hecho, habría que preguntarse si no costará más que el sueldo de un director general el cambio de oficinas del personal en algunos casos, del papel timbrado con las nuevas denominaciones de las distintas áreas y los dos meses de desempleo que se le da al cargo que cesa si lo pide y no tiene otro trabajo. Esto sería sólo si, como dice la oposición, a la mayoría de los que se les destituyen no se les busca otro hueco en la Administración. Entonces ya no sólo no sería cuestión de ahorro, tampoco de imagen.