Fútbol planetario

El clásico Real Madrid-Barcelona que se disputa hoy ha despertado una formidable expectación que desborda ampliamente las fronteras del fútbol nacional conquistando el interés y la pasión de aficionados de todo el mundo. El hecho de que el ganador se convierta automáticamente en el favorito para lograr el título de Liga, a pocas jornadas del final, concede un plus de interés al encuentro pero la gran calidad de sus plantillas y el brillo de individualidades como Messi y Ronaldo asegura un espectáculo deportivo del máximo nivel. No es estrictamente la confrontación del talonario frente a la cantera pero ciertamente ambos clubs simbolizan estilos diferentes de gestión económica y deportiva. Sin embargo, no se puede olvidar que el partido representa la cara más deslumbrante de un deporte que arrastra graves problemas económicos y laborales. La huelga de futbolistas que podría paralizar la competición una semana más tarde es la luz de alarma de un espectáculo que hace tiempo vive por encima de sus posibilidades.